Cuando Pedro Vera nació y fue diagnosticado con la enfermedad cardíaca, el “Síndrome de Wolf Parkinson White”, pareciera que hubiese sido bautizado de una vez con las palabras: reto y superación. Lo que en un principio era un mal presagio, pues a su madre le informaron que no alcanzaría los 18 años de edad, se convirtió en todo un aprendizaje de vida, en el cual, el deporte siempre ha sido su gran escuela.
Luego de dos operaciones cardiovasculares hizo el camino de Santiago de Compostela, ha participado en numerosas carreras y ultramaratones, fue el primer venezolano en inscribirse y culminar exitosamente “The Jungle Marathon 2013” (Brasil, 289 km); ha competido en tres ediciones consecutivas de El Cruce Columbia (100 km, Patagonia Chile-Argentina); y, ahora, Venezuela estará presente, por primera vez, con el dorsal #3, en el “Ultra Bolivia Race 2014” (170 km, Bolivia).
Esta próxima carrera es totalmente diferente a las que ya ha hecho. Comenzará sobre los 3850 msnm y llegará por encima de los 6000 msnm, cuando tenga que subir por volcanes que superan esa altura. Buena parte de la ruta será en el Salar de Uyuni que es el mayor desierto de sal en el mundo, 10.000 km2 de sal a 3.650 m de altitud. La temperatura será algo muy difícil, porque en la noche el pronóstico es de -15 grados bajo cero y en el día correrá con el espejo de sal, a esa altura la sensación térmica estará por encima de los 38 ºC.
Durante seis días la competencia se desarrollará con total autosuficiencia, corriendo con todo lo necesario encima. La Organización diariamente les proporcionará 10 litros de agua que deberán distribuir muy bien y tendrán un tiempo máximo para completar cada etapa sin ser descalificados. La salida para todos los corredores será el lunes 23 de junio y la meta de llegada los esperará el sábado 28. Participarán corredores de más de 13 países, rompiendo las barreras culturales y del lenguaje y, allí, Venezuela dirá presente con Pedro Vera.
“Me gusta ser pionero en lo que hago. Asumir nuevos retos, que cada uno sea único, porque lo que se vive en ellos te alimenta el espíritu, hace comprender que somos capaces de romper paradigmas y barreras que nosotros mismos y la sociedad nos va colocando. El límite de lo que somos capaces de hacer está en nosotros mismos. Siempre se puede más”, afirma Vera.
Con estrategia y preparación, todo es posible
Como todo ultramaratón requiere una estrategia y preparación. En este caso, el Ultra Bolivia Race exigió que Vera tuviese que entrenar en altura, con mucho calor y frío. “La fortaleza muscular ha sido importante, porque al correr en tanta altura los músculos serán vitales para darlo todo, de allí que 3 días a la semana me dedique a fortalecer las piernas y abdominales. Al culminar cada entrenamiento consumo un batido de proteína Liv, nuevo producto venezolano que me ayuda en la regeneración muscular. Todo el entrenamiento para esta carrera fue diseñado por Gerardo Celli, director de Rx Fitness Terapéutico y en cuanto a la alimentación, que también debe ser cuidadosa para no descompensarme, Gabriel León, director de Nutrisport fue mi guía”, comenta.
Al ser una carrera de autosuficiencia, todos los detalles del equipo y la ropa también son relevantes. “Lobby es una marca venezolana de la Tienda 8 Miles y el bolso con el que correré fue fabricado por su director, Luis Martínez, especialmente para esta carrera; al igual que el saco de dormir que está diseñado para ser ligero y aguantar temperaturas superiores a -15 grados ºC. Por otra parte, Helly Hansen me dota de toda la ropa, calzado y accesorios necesarios con tecnología de punta”, destaca Vera.
Adicional, el ultramaratonista agradece el apoyo del Ministerio del Poder Popular para el Deporte y comenta: “Es una alegría que el Estado sume su apoyo a esta dura disciplina, porque el país tiene grandes corredores con muchas posibilidades de lograr buenos resultados aquí y en el exterior. Por supuesto, para mí sería imposible estar en estos grandes eventos sin el respaldo de Policlínica Los Guayos, cuyo equipo ha estado allí conmigo desde el principio, acompañándome en estos retos; y a PFteam TrailRunners, que me orienta con la logística y todo lo que sea necesario. Finalmente, agradezco a mi familia que, a pesar de no estar de acuerdo en ocasiones de que haga eventos tan duros, siempre me da ánimo”.
Serán muchos días de condiciones extremas y aún así aspira a traerse una medalla de ganador, porque se siente suficientemente preparado, tanto mental como físicamente y para este tipo de competencias se requiere 70% de fortaleza mental y 30% de condición física.
“La vida también me ha enseñado a través de todo lo que he hecho que sí se puede lograr el objetivo, por muy lejos que se vea. Siempre debemos trazarnos un plan de acción y ejecutarlo, teniendo a la mano desde la alternativa B a la Z y, si es necesario, volver a comenzar el alfabeto. Debo decir que no siempre sale tal cual como lo planeamos, pero debemos seguir con alternativas, sin desviarnos del fin”, asegura Vera.
Nota de Prensa
