Johan Alberto Parra (34), alias el “Mortadela”, festejaba su cumpleaños 34 cuando su homicida lo atacó con un arma nueve milímetros. Los testigos identificaron al asesino como el “Churrito”, un conocido azote del barrio Silvestre Manzanilla
Los parientes del occiso llegaron temprano a la morgue forense para concretar los detalles de la entrega del cuerpo. (Foto: Juan Guerrero)
Un hombre apodado el “Churrito” vació el cargador completo de una pistola 9 milímetros sobre la humanidad de Johan Alberto Parra (34), alias el “Mortadela”, quien se encontraba tomando en una venta clandestina de cervezas del barrio Silvestre Manzanilla, parroquia Caracciolo Parra Pérez, en el oeste de Maracaibo. A pesar de la cantidad de tiros recibido, la víctima resistió lo suficiente como para ingresar al Hospital Universitario, donde murió cinco minutos después.
Los familiares del ultimado señalaron que la noche del sábado, a las 9.00, Parra estaba en su casa, ubicada en el barrio La Conquista, en Venancio Pulgar, pero cercano al lugar del hecho donde se preparaba para celebrar su cumpleaños que era ayer. Tras ponerse su mejor vestimenta salió, junto a un amigo, hacia la recóndita tasca. Allí bebió, bailó y cantó hasta la 1.00 de la madrugada, hora en la que el “Churrito” entró por la puerta de la vivienda.
Como si de un milagro se tratara el efecto del alcohol, en la cabeza de Parra, desapareció. Estaba decidido a encarar al “Churrito”. Ni la música pudo con los gritos que ambos hombres se lanzaban mutuamente. Ya cansado de cruzar insultos el recién llegado sacó una pistola y la accionó en múltiples oportunidades en contra de “Mortadela”. Aunque lo quiso rematar, no pudo. Una bala alcanzó en el hombro al malhechor antes que pudiera concretar la fechoría en el sitio.
El proyectil que impactó en el “Churrito” provenía de un arma de fuego de otro hombre que estaba en el sitio. El homicida tuvo que huir antes que otra bala lo alcanzara nuevamente. Hasta ahora los familiares de la víctima no saben quién defendió a “Mortadela”. Para cuando los parientes del baleado se enteraron de la noticia ya lo llevaban para el hospital en el cual murió.
Deuda y venganza
Los vecinos informaron que el problema entre los dos sujetos era por dinero. Al parecer “Churrito”, quien también es prestamista, le prestó dinero a “Mortadela”, quien nunca honró la deuda. Esto originó una rencilla meses atrás que nunca fue saldada, al menos, hasta el domingo en la madrugada. Nadie vio hacia dónde huyó del homicida, pero muchos vieron lo que hizo, por eso la Policía científica lo busca.
La búsqueda el cuerpo detectivesco originó más tensión cuando los funcionarios fueron a la casa de “Churrito” y cargaron con pistas que pudieran dar con su paradero y en el proceso, supuestamente, causaron destrozos. Esto originó que los parientes del evadido amenazaran a los parientes de Parra con causar los mismos estragos en la vivienda de la familia del difunto.
15 tiros recibió el “Mortadela” el día de su cumpleaños número 34
Por José Manuel Sánchez
Foto: Juan Guerrero
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