El Arzobispo de Maracaibo y Presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana, Mons. José Luis Azuaje, exhortó a los obispos y sacerdotes de Venezuela a ejercicio de su ministerio y continuar abiertos a la esperanza en el Señor, para enfrentar un futuro incierto.
Las declaraciones las hizo durante el Encuentro Virtual Conjunto de Obispos y Sacerdotes, que inició este martes 19 de enero de 2021.
En su pronunciamiento dijo a los religiosos que es necesario que en cada actuar se pregunten «¿dónde está el hermano?». Una pregunta que dice encarna responsabilidad no sólo ética, sino cristiana.
«No estamos en el mundo para el sufrimiento, para la desdicha, el Señor no ha ungido a los suyos para la muerte sino para la vida. Desde la resurrección somos ungidos para la vida, para la esperanza, lo que implica que todos somos necesarios e importantes para la obra humanizadora y salvadora del Señor», dijo.
Ante la realidad de la pandemia, afirmó que «este virus ha golpeado todas las instancias de la vida humana», y que «ha generado una incertidumbre inmensa en el presente y hacia el futuro, ha cambiado nuestro modo de relacionarnos y de hacer las cosas», una situación que dice ha servido para constatar no solo la fragilidad humana sino también de la vida económica, política, social, cultural y hasta religiosa.
«El punto focal que debemos sentir ante toda esta realidad, es que todos hemos sufrido y que nuestro pueblo sigue sufriendo (…) este sufrimiento se agiganta en nuestro pueblo con la serie de crisis ya presentes antes de la pandemia y que a través de ella se han profundizado».
Azuaje señaló que los sacerdotes ante su responsabilidad con el ciudadano «debemos asumir los riesgos y retos que el futuro incierto nos depara», una misión que insiste requiere de ser conscientes de que «solo con el Señor podemos vencer los miedos y abrirnos a la esperanza».
«En un tiempo de gran incertidumbre, les animó a trabajar para generar una visión de futuro con esperanza, recordando que la humanidad siempre se ha sobrepuesto a las adversidades de cada época. «La fe cristiana tiene mucho que aportar a través de nuestro servicio, y uno de estos aportes básicos es la esperanza hacia el futuro».
Para hacerlo, compartió cinco criterios claves:
1.Despertar la confianza
2.Desarrollar una actitud optimista
3.Construir una cultura del encuentro
4.Comprensión para acercarse con empatía
5.Abrir horizontes
Fuente: CEV/PL