El incremento del 25% en el precio de la pasta y de una reducción a 50% de la cuota de producción de la presentación regulada, le darían un respirito poco al sector industrial, pero seguirán operando a pérdida.
«El aumento anunciado es insuficiente», dijo Nicolás Constantino, presidente de la Asociación Venezolana de Molinos de Trigo (Asotrigo), quien informó que con el nuevo precio de Bs. 5,41, el sector perderá Bs. 3 por cada kilo de pasta regulada que procese.
En cuanto a la flexibilización de la cuota de producción de la presentación regulada, indicó que aspiraban que se redujera a 30%; «pero se acordó rebajarla a 50%.
La agroindustria entiende el que la adecuación del precio de la pasta no se puede hacer de un solo golpe. «Ajustar el precio a la verdadera estructura de costos generaría un fuerte impacto en el bolsillo del consumidor». El empresario resaltó que aún con el aumento ofrecido, el precio de la pasta seguiría siendo solidario al consumidor.
Dijo que el Gobierno ofreció hacer ajustes cada tres o cuatro meses hasta llevar el precio a su verdadero valor, el cual estiman hoy día en Bs. 11,47 el kilo para la pasta regulada. «Este Gabinete Económico entiende que los ajustes deben ser más frecuentes. Confiamos en que cumplirán su promesa de hacer adecuaciones periódicas y si en realidad cumplen, subsistiremos», dijo el representante gremial.
Indicó que la industria procesadora de pasta ha estado subsidiando la pérdida que les produce la pasta con la elaboración de otros productos. «Pero hay empresas que solo producen pasta».
Fuente: Últimas Noticias