Después de los festejos de Navidad y Año Nuevo, de tener un gran almuerzo o de pasar un fin de semana descontrolado, ¿cómo podemos desintoxicarnos? Lo más importante es evitar las comidas pesadas y apostar por las que sean fáciles de digerir.
Nada más levantarse, en ayunas, conviene beber un vaso de jugo de naranja y otro de agua. Los líquidos son esenciales para nuestra salud. Luego, hacer un desayuno liviano, compuesto por yogurt, fruta, pan integral y té endulzado con miel o café con leche, según los gustos.
Desintoxicate por una semana
Una vez que queden atrás los platos con muchas calorías y grasas, depurá tu organismo con una semana de alimentación saludable: frutas, hortalizas y líquidos serán tus aliados.
* Tomá sin límite: agua, soda, caldo light, infusiones sin azúcar y gelatinas light. Incorporá por lo menos dos litros y medio de agua al día.
* Consumí abundante cantidad de frutas y vegetales frescos y en jugos.
* Consumí cereales integrales.
* Comé más pescado.
* Consumí yogures descremados.
* Cená liviano: incluí hortalizas, carnes magras y frutas.
* Evitá embutidos, chacinados, fiambres, manteca, mayonesa y frituras.
* Reducí el consumo de sal.
* Tomá té de manzanilla, valeriana, tilo o cedrón para reemplazar al café.
* Movete cada día más: borrá el ascensor de tu mente, elegí caminar o ir en bicicleta para usar menos el auto, hacé una actividad física de tu agrado y convertila en hábito.
Depuradores totales
Depurador 1: Todas las mañanas tomá un jugo de una naranja, una zanahoria y una pera.
Depurador 2: Todas las tardes tomá un yogurt descremado con tres cucharaditas de té de semillas de chía, girasol y lino.
Fuente: Entre Mujeres