Los payasos fueron inventados para entretener al público, en especial al público infantil, sin embargo a muchos niños esta idea no les causa gracia.
Cuando una persona le tiene miedo a un payaso se le conoce como coulrofobia, y de acuerdo con investigaciones llevadas a cabo de 1970 a 1987, se determinó que es a consecuencia del efecto que causa su gran maquillaje, su extraña cabellera, su vestuario y sus gestos contradictorios, como llorar cuando tiene pintada una gran sonrisa, los cuales no son verdaderas respuestas emocionales.
De acuerdo con una investigación que se llevó a cabo en la Universidad de Sheffield, a los niños les asusta que las habitaciones de los hospitales tengan como decoraciones a payasos. Por otro lado un profesor de psicología de la California State University Northridge a los niños les impresiona ver un cuerpo común con una cara poco familiar.
Lo que significa que como personas somos sensibles a cosas extraordinarias, más cuando se trata de un niño, ya que en su corta vida no está acostumbrado a ver muchas cosas.
Fuente: CfanMujeres