La imagen de las piernas de Sydney Leroux, delantera de la selección femenina de fútbol de Estados Unidos, preocupa: varias raspaduras sangrantes después de un partido con su equipo los Boston Breakers disputado en un campo con césped artificial en abril de 2013.
«Por esta razón es que el fútbol solo se debe jugar sobre grama natural», escribió Leroux después del encuentro en su cuenta de Twitter y colocó esa foto.
El Mundial de Fútbol Femenino que se disputará en Canadá entre el 5 de junio y el 6 de julio de 2015 será el primer torneo de mayores organizado por la FIFA que será jugado en su totalidad en césped artificial.
Este hecho ha generado una polémica que gira alrededor de una pregunta: ¿Por qué las mujeres tienen que jugar en grama sintética, mientras que el Mundial de los hombres se juega en el césped natural?
«El fútbol se juega diferente en la grama artificial, no sólo por el temor de una lesión, sino porque es una superficie totalmente distinta», dijo a la revista estadounidenseSports Illustrated Abby Wambach, capitana de la selección femenina de Estados Unidos.
Y añadió: «En la FIFA hay una discriminación de género al obligarnos a jugar en una cancha que tiene una superficie de segunda clase».
Las razones de la FIFA
En la década de los 80, la UEFA y la FIFA habían prohibido disputar partidos profesionales en superficies artificiales por las lesiones ocasionadas.
Pero a partir de la exigencias hechas por los jugadores y las federaciones, el material mejoró ostensiblemente. Y fue a partir del Campeonato Mundial Juvenil de Finlandia 2003 que se comenzó a utilizar los gramados sintéticos en torneos oficiales.
A pesar de ello, todos los campeonatos en las categorías mayores se han disputado sobre grama natural. Solo en las ediciones de Sudáfrica 2010 y Brasil 2014 se utilizó lo que se conoce como césped híbrido, que combina la hierba natural con unos injertos sintéticos.
Pero debido a que la mayoría de los estadios en Canadá tienen grama artificial, la Federación de Fútbol de Canadá y el comité de organización del Mundial femenino le solicitaron a la FIFA la autorización para que el torneo se jugara en esta superficie.
«De acuerdo con las leyes que regulan este tipo de torneos, se decidió aprobar la solicitud hecha por ambos organismos», le dijo a BBC Mundo un vocero de la FIFA.
Basados en esta autorización, los organizadores del Mundial femenino decidieron escoger los seis estadios donde se jugará el torneo con este tipo de superficie.
«Después de conocidas las sedes y de ser aprobadas, se puso la condición de que las superficies de los estadios y los lugares de entrenamientos tenían que cumplir con todos los requerimientos de la FIFA», añadió.
Conejillas de Indias
Después de conocerse la noticia, además de Wambach, otras 40 jugadoras profesionales firmaron una carta donde amenazaban con iniciar acciones legales contra el organismo rector del fútbol si no cambiaba la decisión de jugar el torneo sobre una superficie sintética.
Entre las firmantes se encontraba la excapitana de la selección inglesa Faye White, quien consideró que existe una seria discriminación contra el fútbol femenino.
«La FIFA nunca realizaría un Mundial masculino en canchas artificiales, ¿por qué lo hace con el Mundial femenino?», le dijo White a la BBC.
«Eso nos hizo cuestionar sobre el hecho de que somos una especie de conejillos de indias para la FIFA», añadió.
Además de las posibles lesiones que puede ocasionar el material sintético en las piernas de las jugadoras, como en el caso de Leroux, la mayoría de las firmantes están de acuerdo con que el juego no es el mismo en ambas superficies.
«Es un material de segunda categoría para jugar fútbol: hace más lento el avance del balón, además de que rebota más y es más difícil controlarlo», dijo White.
Sin césped natural
«Es por esto que el fútbol se debe jugar en césped natural», escribió Leroux en su Twitter.
White también cuestionó el hecho de que la FIFA le otorgue la sede de un torneo a un país que no tiene los requerimientos mínimos para hacerlo.
«No puedo creer que Canadá no tenga los suficientes estadios con grama natural para un disputar un Mundial», dijo.
De acuerdo con la página oficial de la FIFA, las condiciones climáticas y geográficas del país norteamericano hacen propicio el uso de campos con superficies sintéticas.
«Canchas al aire libre en las ciudades de Edmonton y Moncton no pueden ser utilizadas durante el invierno que se prolonga por varios meses», se puede leer en una de sus páginas.
«Luego está el hecho de que el estadio olímpico de Montreal es un escenario cubierto, que hace imposible el crecimiento de césped natural por la falta de luz».
El presidente de la FIFA, Sepp Blatter, también respondió a las cuestionamientos de los campos artificiales durante una rueda de prensa en Toronto el pasado 4 de agosto.
«Es cierto que hace unos años jugar en un campo sintético era una pesadilla. Pero se ha mejorado mucho desde entonces en la calidad de las superficies. El césped artificial es el futuro del juego», dijo Blatter.
Fuente: BBC Mundo