La axila o el sobaco es una parte del cuerpo humano muy peculiar. Para algunas personas es casi un tabú, hay quienes la consideran una zona erógena, una fuente de cosquillas o el causal de la vergüenza, especialmente aquellas que tienen axilas oscuras. Pero ¿por qué se oscurecen?
Haciendo un poco de servicio a la comunidad, hoy hablaremos sobre los procesos químicos y físicos del organismo que provocan el oscurecimiento axilar, así como los peligros que esta condición puede traer consigo.
¿Qué es el oscurecimiento axilar?
Se trata de una condición presente tanto en hombres como en mujeres, aunque es mucho más común en estas últimas y especialmente entre aquellas de piel más oscura.
Fisiológicamente, refiere a un cambio en el color de la piel de esta parte del cuerpo, haciéndola más oscura y en algunos casos volviéndola prácticamente negra.
Uno de los grandes problemas en relación con esta condición es que, en mayor o menor medida, puede afectar psicológica y emocionalmente a la persona. Esto puede llevarle a buscar una solución inmediata y por ejemplo encontrarla en la web, donde se ofrecen innumerables soluciones fáciles y rápidas mediante el uso de cremas y bloqueadores.
Sin embargo, experimentos recientes han demostrado que el uso inadecuado de esta clase de cosméticos, sin antes realmente comprender qué es el oscurecimiento axilar y por qué ocurre, puede ser contraproducente, volviéndose muy peligroso para la salud. Veamos algunos de los factores que producen este cambio en el cuerpo humano.
Pigmentación de la piel y melanina
Comencemos por entender qué es la pigmentación de la piel. Veamos, todos alguna vez experimentamos algún cambio en el color de la piel, por ejemplo cuando vamos a la playa o simplemente cuando nos exponemos más de lo normal a los rayos ultravioletas (UV) del Sol. Los rayos UV, al alcanzar la piel, estimulan las células encargadas de la producción de melanina, conocidas como melanocitos.
Cuando los melanocitos se estimulan producen un pigmento de color oscuro, algo amarronado (la melanina).
La melanina en nuestra piel y el pelo, entre otros tantos lugares, se encarga de proteger el cuerpo de los rayos UV disipando la energía que puede resultarnos dañina en forma de calor. Por su color, de forma consecuente, mientras más melanina se produce: más oscura se vuelve la piel.
Por otra parte, no sólo la exposición a los rayos del Sol es capaz de provocar excesos en las producciones de melanina sino que algunas enfermedades también pueden hacerlo. Un ejemplo es la denominada hiperpigmentación, un síntoma que generalmente ayuda a revelar problemas de salud como la enfermedad de Addison, que se produce cuando las glándulas suprarrenales no elaboran las suficientes cantidad de hormonas esenciales.
Otras causas
Durante el embarazo también puede haber un exceso en la producción de melanina y, como consecuencia, la aparición de manchas negras en la piel y el oscurecimiento de las axilas. La hiperpigmentación es uno de los trastornos de la piel más comunes, pero está dando cuenta de una insalubridad o de una anomalía en el funcionamiento de la pigmentación a tener en cuenta, por último, las axilas son propensas a esta condición.
La diabetes y los problemas con las hormonas de insulina también pueden tener que ver. Los excesos de insulina en el torrente sanguíneo pueden estimular el incremento constante de células de la piel, lo que provoca un engrosamiento de la misma y finalmente el oscurecimiento.
En casos extremos, esta condición hace que la piel tenga un aspecto muy espeso y casi que aterciopelado, en medicina, los dermatólogos le llaman acantosis nigricans y también suele desarrollarse sobre todo en la zona de las axilas.
Fuente: OjoCientifico