La ola de inseguridad aumenta su rango de acción, tanto así que hasta medianos y grandes comercios han visto la obligación de concluir sus actividades a tempranas horas del día, a fin de cuidar la integridad de sus trabajadores. Dichas acciones comprometen las actividades económicas de las empresas, debido a que presenta disminución de ingresos.
Luis Marín, presidente ejecutivo de la Cámara de Industriales del estado Lara, expresó que con frecuencia los trabajadores del organismo han expresado su intención de terminar su jornada con antelación, para regresar a sus hogares sin ser víctimas de la delincuencia.
“Varios elementos perjudican la calidad de vida del trabajador que labora en las zonas industriales; en primer lugar, la vialidad, cuyo deterioro no permite que el transporte público transite. Además, existe el desperfecto del alumbrado público, lo cual ocasiona que la práctica de delinquir se realice con mayor facilidad”.
Agregó que por tales motivos, las empresas han tenido que contratar medios de transporte privados para el traslado de sus trabajadores.
En consecuencia, aumentan los costos de unas empresas que a duras penas puede subsistir por la crisis económica.
“Hemos hecho algunos esfuerzos con la Comisaría Andrés Eloy Blanco, contribuyendo con la reparación de patrullas para mayor presencia policial en las zonas industriales 2 y 3; sin embargo, no escapamos de la situaciones que ocurren a diario por la crisis presupuestaria de la policia, institución que no cuenta con unidades óptimas para desarrollar su labor”.
Complementando su relato, también quiso expresar las causas de la inseguridad en el país, considerando que la falta de empleo y desatención de los problemas de las comunidades han conllevado a un ambiente lleno de agresividad e irrespeto.
“El Gobierno debe responsabilizarse del bienestar de las familias más vulnerables y reactivar las unidades de producción de empresas públicas y privadas, para que generen mayor cantidad de empleos”.
Fuente: EI