Casi tres semanas después del derrumbe de un edificio de ocho pisos que albergaba fábricas textiles cerca de la capital de Bangladesh que dejó 1.127 muertos y 2.438 heridos, el gobierno del país ha decidido aumentar los derechos de los trabajadores del sector.
A partir de ahora, los trabajadores del sector textil podrán crear sindicatos, negociar salarios más altos y mejores condiciones laborales, anunció el portavoz del gobierno, Mosharra Hossain Bhuiyan.
El gobierno decidió anoche subir el salario mínimo de los trabajadores textiles, actualmente cercano a los 30 euros, aunque no se fijó aún una nueva cantidad.
Las autoridades comenzaron también a implantar estándares de seguridad en casi 950 fábricas del país que una comisión de investigación consideró que trabajaban en condiciones de riesgo. En casi 4.000 fábricas textiles del país trabajan más de 3,5 millones de personas.
El vicepresidente de la Asociación de Fabricantes y Exportadores de Textil, Shahidullah Azim, afirmó a la agencia Afp que cientos de fábricas del sector cerrarán por un periodo de tiempo indeterminado debido a «la agitación» de los obreros que generó la tragedia.
Mientras tanto, en el lugar del derrumbe del 24 de abril, terminará mañana la búsqueda de sobrevivientes y muertos. En los 19 días que duraron las tareas de rescate, soldados, bomberos y voluntarios de la Cruz Roja sacaron hasta hoy 1.127 cuerpos y registraron 2.438 heridos. El viernes fue hallada una sobreviviente tras pasar 17 días bajo los escombros. Aún se encuentra internada y recuperándose.
«Mañana martes entregaremos formalmente el lugar del accidente a la administración del distrito», anunció hoy el comandante Sajal Shaykhuzzaman.
Fuente: El Clarín
