Este lunes, el presidente Sebastián Piñera promulgó la reforma constitucional que habilita el plebiscito de entrada para una eventual nueva constitución.
A La Moneda asistieron los timoneles Mario Desbordes (RN), Hernán Larraín Matte (Evópoli) y Fuad Chahín (DC), al igual que el presidente de la Cámara, Iván Flores (DC), el ex Mandatario Ricardo Lagos, y parlamentarios de distintos sectores.
Pese a que anunció que se restaría por los conflictos al interior de Chile Vamos por las aprobadas cuotas de paridad, pueblos indígenas e independientes, la presidenta de la UDI, Jacqueline Van Rysselberghe, llegó al palacio de Gobierno poco antes de la cita, y no saludó ni a Desbordes, ni al ministro del Interior, Gonzalo Blumel.
El Mandatario agradeció a los presidentes de partidos que hicieron posible el acuerdo del pasado 15 de noviembre, ya que «con la misma visión y generosidad que sabemos demostrar en los tiempos difícil, lograron un acuerdo que nos permite estar promulgando la reforma a la constitución».
Además, aseguró que este proceso constituyente «nos debe servir para dejar atrás la violencia y las divisiones que vemos visto surgir durante estos días». Por otro lado, indicó que debe servir para «aprender a pensar y trabajar juntos, para construir ese Chile mejor que todos queremos».
En ese mismo sentido, realizó una crítica al debate político que se ha dado hasta el momento en torno a una posible nueva constitución, ya que según el jefe de Estado ha estado centrado «en los procedimiento y yo creo que no ha profundizado en los contenidos».
Imagen Agencia UNO