La industria procesadora de pasta se declaró en emergencia y exhortó al Gobierno a reajustar el precio de la pasta regulada y manejar con mayor celeridad el tema de la asignación y autorizaciones de pago de divisas para pagar el trigo.
«Existe una serie de variables que hacen que la situación sea compleja, crítica; no es solo un problema de precio», dijo Simón Nobile, presidente ejecutivo de la Asociación Venezolana de Fabricantes de Pastas Alimenticias (Avepastas), quien -mediante un comunicado de prensa- recordó que el último ajuste de precio de la pasta se produjo hace dos años, cuando el producto aumentó a Bs 4,33 el kilo.
Aseguran que en esos dos años el sector ha sufrido incrementos en los precios de la materia prima, insumos y mano de obra. «Los costos de las contrataciones colectivas han aumentado», afirmó un vocero de la industria pastificadora.
«Tenemos un fuerte rezago; se pierden Bs 2,50 por cada kilo de pasta regulada que se procesa». Nobile recordó vía telefónica que el precio de la pasta está fijado por debajo de los del arroz y la harina precocida, cuyas materias primas son de producción nacional.
Informó que a final del año pasado sostuvieron varias reuniones con diversos entes gubernamentales: «Nos prometieron que, posterior a las elecciones, nos resolverían el problema». Añadió que en este momento «a pesar de todos los alertas que hemos enviado, no hay un ente que defina quién es el responsable de hacer los ajustes correspondientes».
Impacto grave. Según Nobile, algunas industrias todavía cuentan con inventarios a Bs 4,30 por dólar: «Incluso, algunas prestan a otras para que sigan operando».
Además, el Gobierno no ha entregado algunas autorizaciones de divisas pendientes a dólar viejo: «Hay embarques listos para despachar el trigo y ha habido que aplazarlos». Dijo que las empresas temen hacer nuevas importaciones hasta saber el nuevo precio final de la pasta.
Fuente: Últimas Noticias