La policía surcoreana solicitó una orden de arresto contra el consejero delegado de Korean Air Lines, la mayor aerolínea del país, por haber desviado presuntamente fondos de la empresa para renovar su residencia particular.
Cho Yang-ho, máximo responsable de la aerolínea y también presidente de su matriz, el grupo Hanjin, es sospechoso de haber empleado unos 3 mil millones de wones (2,2 millones de euros) de la caja de la empresa para pagar unas obras en su vivienda en Seúl, según anunció un portavoz de la policía.
Las autoridades surcoreanas llevaron a cabo una redada en las oficinas de la aerolínea en julio en el marco de la investigación sobre el caso, e interrogaron el mes pasado al empresario, quien hasta el momento ha negado haber cometido ningún delito, señalaron fuentes judiciales a la agencia local Yonhap.
La policía surcoreana también ha solicitado el arresto de otro alto ejecutivo de Korean Air Lines que habría estado involucrado en el desvío de fondos para uso personal.
El “chaebol” o conglomerado financiero surcoreano Hanjin también es propietario de la naviera del mismo nombre, que se declaró en quiebra en agosto del año pasado y se encuentra actualmente en proceso de liquidación bajo administración judicial.
La bancarrota de la mayor naviera surcoreana, que realizaba envíos a más de 90 puertos principales y 6 mil destinos a nivel internacional, ha sido una de las más sonadas en el sector del transporte marítimo y causó graves alteraciones del tráfico internacional de mercancías.