La petrolera brasileña Petrobras tiene las puertas abiertas para un futuro acuerdo que le permita a la venezolana Pdvsa participar en la refinería que construye en el noreste de Brasil, pese al fracaso de las negociaciones entre ambas empresas, informaron hoy fuentes oficiales.
«Sería una falta de cortesía de nuestra parte no estar dispuestos a una apertura en caso de que ellos aparezcan», afirmó el director de Abastecimiento de Petrobras, José Consenza, en una rueda de prensa en Río de Janeiro.
La mayor empresa de Brasil anunció el pasado viernes su decisión de terminar en solitario la construcción de la refinería Abreu e Lima, debido al fracaso de las negociaciones con la Pdvsa para que la venezolana tuviera una participación en la unidad.
La dirección de la petrolera estatal brasileña optó por incorporar a su estructura la subsidiaria que había sido creada para gestionar la refinería ante la posibilidad de que la unidad tuviese dos socios como propietarios.
«Veníamos negociando con PDVSA desde hacía mucho tiempo pero en un momento la empresa venezolana presentó una propuesta muy diferente. Lo que estaba establecido al comienzo de las negociaciones continúa válido», dijo Consenza.
El ejecutivo dijo que, tras la decisión del viernes, la refinería pasó a ser propiedad en un 100 % de Petrobras, pero que la empresa venezolana podrá tener una participación en caso de que lo desee y acepte las condiciones iniciales de la negociación.
El plan inicial era que Petrobras aportara un 60 % del capital de la refinería y Pdvsa el 40 % restante.
El proyecto binacional fue planeado en 2005 por los entonces presidentes Luiz Inácio Lula da Silva y el fallecido Hugo Chávez, pero la alianza pasó por diferentes problemas debido a divergencias en los avales presentados por Pdvsa, que el banco brasileño responsable por la financiación no consideró adecuados.
Debido a estos problemas, Petrobras inició las obras en solitario en 2007 con recursos propios y según la empresa ya concluyó el 80 % de las obras.
La refinería de Abreu e Lima está ubicada en el estado de Pernambuco, tiene una capacidad proyectada para procesar 230.000 barriles diarios de petróleo y su construcción ha exigido ya inversiones por cerca de 18.000 millones de dólares.
La previsión más reciente es que el primer parque de la refinería comience a operar en 2014 con capacidad para 115.000 barriles diarios.
Consenza aclaró que Petrobras optó por asumir totalmente la refinería para mejorar la ejecución de las obras y facilitar la operación de la refinería el próximo año.
Ello debido a que para procesar el petróleo venezolano, más pesado que el producido actualmente por Brasil, necesitaría de equipos diferentes a los que están siendo montados.
El ejecutivo agregó que serán necesarios algunos cambios en el proyecto para aumentar la capacidad de procesamiento de petróleo brasileño, que es más ligero que el venezolano.
Fuente: ÚN