El mandatario colombiano afirmó que la sanción, que lo ubica en la misma categoría de «los peores narcotraficantes», se originó tras sus declaraciones en las calles de Nueva York durante la pasada Asamblea General de las Naciones Unidas
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, rompió el silencio sobre la sanción impuesta por la administración de Donald Trump, la inclusión en la Lista Clinton (Lista de Nacionales Especialmente Designados), una medida que, según él, afecta su futuro financiero personal.
Durante un evento regional en Cali, el mandatario admitió abiertamente su preocupación por las repercusiones de la medida, citando un pasaje bíblico. De acuerdo con reportes de la revista Semana, el jefe de Estado colombiano no ocultó su incertidumbre al referirse a la vida después de su cargo.
«No sé cómo voy a vivir después de que salga del gobierno, pero Dios proveerá, dice la Biblia», dijo.
Petro afirmó que la sanción, que lo ubica en la misma categoría de «los peores narcotraficantes», se originó tras sus declaraciones en las calles de Nueva York durante la pasada Asamblea General de las Naciones Unidas.
En esa ocasión, el presidente se unió a una manifestación pro-Palestina y, con megáfono en mano, hizo un llamado directo al Ejército de Estados Unidos a desobedecer las órdenes de Donald Trump, en caso de que este ordenara una acción militar en Palestina.
“Desobedezcan la orden de Trump, obedezcan la orden de la humanidad. Yo mismo me arrodillé como cristiano ante las tumbas de miles de soldados norteamericanos que murieron en los campos de Europa luchando contra Hitler”, dijo en esa oportunidad.

No obstante, desde Cali, el presidente ajustó su versión de lo ocurrido, sugiriendo un malentendido. “Trump creyó porque dije en la calle que si el Ejército de Estados Unidos va a Palestina a dispararle a ese ejército donde estaremos nosotros, no obedezcan; creyó que le estaba diciendo a la policía de Nueva York que no le obedecieran a él”.
A pesar de la magnitud del castigo del Departamento del Tesoro, Petro concluyó su reflexión apelando a su capital político como respaldo para su sobrevivencia: “Y en verdad mi experiencia me ha enseñado que en cuestiones de sobrevivencia, si uno tiene el apoyo del pueblo, no hay problema, siempre alguien dará la mano en cualquier lugar del mundo”, subrayó el presidente colombiano.










