– 7-8 tomates secos
– 40 gramos de albahaca fresca
– 80 gramos de piñones
– Dos dientes de ajo
– 150 ml de aceite de oliva virgen
– 50 gramos de queso tipo Parmesano
– 50 gramos de queso tipo Pecorino
– Sal
Esta receta de pesto con tomate que te proponemos aquí es una salsa ideal para acompañar tus platos de pasta, entre otros, ya que resulta muy sabrosa por la mezcla de ingredientes que tiene, y además es sencilla de preparar, como verás a continuación. Hay que tener en cuenta que para poder prepararla hay que dejar previamente los tomates secos en remojo al menos una hora u hora y media, mejor si es en agua caliente, así que es lo primero que hay que hacer para tenerlos listos a la hora de ponernos a preparar el pesto con tomate.
Tras haber dejado los tomates secos en remojo el tiempo indicado, comenzamos a preparar ya nuestra salsa, así que comenzamos picando los tomates un poco, en trozos más pequeños. Lavamos bien las hojas de albahaca, desechando los tallos, y los escurrimos después. Pelamos además los dos dientes de ajo y los troceamos o laminamos, como cada uno prefiera. Y ahora nos ponemos ya a preparar el pesto, para lo que normalmente se emplea un mortero tradicional, para triturar todo a mano, aunque si quieres facilitarte la tarea, puedes utilizar una batidora.
Echamos las hojas de albahaca fresca y los tomates secos hidratados y troceados, bien en el mortero o en el vaso de la batidora, junto con los dientes de ajo picados y los piñones, y vamos a machacarlo o picarlo todo lo mejor posible, hasta que queden bien mezclados. Agregamos el aceite de oliva virgen y mezclamos bien con el resto de los ingredientes de la salsa, hasta que la salsa nos quede más espesa y homogénea. Una vez tengamos lista esta primera mezcla, podemos meterla en un tarro o recipiente cerrado hasta que la necesitemos, así los sabores se mezclarán mejor.
Y ya en el momento de acabar de preparar el pesto con tomate, echamos esa mezcla en un recipiente más amplio y agregamos el queso rallado, mejor si puede ser la mezcla que os indicamos en la lista de ingredientes, para compensar los sabores de los mismos y hacer más cremoso la salsa resultante. Mezclamos bien de nuevo hasta que nos quede una salsa más bien densa, a la cual podemos agregar un poco de agua si queremos dejarla un poco más líquida, o un poco más de queso si por el contrario queremos espesarla más. Y así ya podríamos servir este estupendo pesto con tomate junto con el plato con el que queramos que acompañe, ya verás que rico te queda.