El recorte en la producción ha sido significativo. Nueve mil 500 cauchos diarios se fabricaban en la planta Bridgestone Firestone de Valencia, pero ese número ha sufrido un dramático descenso. Apenas 600 unidades por jornada se lograron hacer a finales de la semana pasada.
Esto es una paralización disfrazada, dijo Marco Acosta, instructor de entubadora. La empresa también fijó su posición. A través de un comunicado enviado a los medios de comunicación aclaró que ha realizado un ajuste en sus niveles diarios de fabricación de cauchos, con la finalidad de extender la materia prima en existencia y poder mantener sus operaciones.
Luego de la propuesta de la compañía de adelanto de vacaciones a aquellos trabajadores cuya fecha de aniversario sea hasta el 30 de junio, la jornada de esta semana inició con 500 personas menos en planta. Por eso se preparó un cronograma que suspende el tercer turno y divide en dos cuadrillas al grupo que sigue activo.
En jornadas de cuatro u ochos horas, dependiendo de cada departamento, de 6 a.m. a 2 p.m. se trabaja en la preparación de materiales que pasan al área de armados, donde en el segundo turno de 2 p.m. a 10 p.m. se hace el balanceo que cierra la producción. En condiciones normales todo el proceso se hace completo en cada turno y no de manera compartida.
Acosta aseguró que con este mecanismo lo que se pretende es mantener activas las líneas de fabricación durante el día ante el aviso de una inspección que realizarían el lunes 2 de febrero el diputado José Ávila y el viceministo de Producción y Comercio, Carlos Farías, que fue pospuesta para finales de la semana.
Pero bajo este mecanismo de trabajo se logró incrementar la manufactura de cauchos. El lunes se hicieron mil 863. La meta de la empresa es que se fabriquen entre dos mil 500 y tres mil unidades diarias, pero los procesos de arranque tras una paralización en plantas como la de Firestone son lentos. Se espera alcanzar el número planteado entre el viernes y el lunes.
Dayrí Blanco
Fuente: El Carabobeño