El presidente Enrique Peña Nieto anunció el miércoles la salida del secretario de Hacienda Luis Videgaray y aunque no ofreció las razonas de su dimisión muchos en México la atribuyeron al papel que habría tenido el funcionario en la visita del candidato presidencial republicano Donald Trump.
Peña Nieto, que detenta los niveles más bajos de popularidad de todo su mandato, no explicó los motivos que llevaron a Videgaray a presentarle la renuncia pero expresó su “más amplio reconocimiento” institucional y personal a quien fue uno de sus más cercanos colaboradores desde antes de llegar a la presidencia.
“Ha sido un funcionario comprometido con México y leal con el presidente de la república. Muchas gracias Luis”, dijo en un breve mensaje a la prensa.
Desde el departamento que dirigía Videgaray tampoco se explicaron los motivos de su dimisión, que llegó una semana después de la visita de Trump que, de acuerdo con algunos medios, habría sido idea de Videgaray.
Peña Nieto negó en una entrevista con Milenio Televisión que la propuesta de invitar al republicano hubiera sido de algún asesor y aseguró que se trató de una iniciativa suya. “Nadie me recomendó (invitarlo). Es una decisión que tomo como presidente de México… Asumo el costo que ha representado este tema”, dijo.
Sin embargo, a los pocos días del encuentro empezaron a proliferar informaciones en el sentido contrario.
El diario Reforma publicó, citando fuentes anónimas, que la decisión de invitar a Trump se tomó una semana antes de la visita después de una reunión de Peña Nieto y Videgaray y pese a la desaprobación de la canciller Claudia Ruiz Massieu.
AP