Seguro que muchas de nosotras tenemos la clara idea en la cabeza de que queremos encontrar a la persona de nuestros sueños, esa persona a la que amar y sentirnos amados y pasar el resto de nuestras vidas junto a ellos. Pero claro, esta idea a veces resulta demasiado idealista, incluso utópica, se atreverían a decir muchas personas.
Por eso, mientras esperamos a que esa persona de nuestros sueños aparezca en nuestras vidas, podemos disfrutar de nuestra sexualidad y de nuestro placer mediante el sexo sin compromiso. El sexo sin compromiso puede estar muy bien ya que nos sirve para satisfacer nuestros deseos más íntimos, pero a veces también puede entrañar algunos peligros.
Uno de esos peligros, quizá al que muchos temen, es que se despierten sentimientos hacia esa persona con la que mantenemos sexo ocasional. El sexo sin compromiso está muy bien, pero cuando uno de los dos comienza a tener sentimientos y esos sentimientos no son correspondidos por la otra persona, la cosa puede acabar muy mal. Y si rizamos el rizo, podemos encontrarnos con otro peligro, el de mantener sexo sin compromiso con nuestro ex – por el hecho de ser una persona conocida- y que uno de los dos aún siga enamorado.
Otro de los peligros del sexo sin compromiso son las posibles enfermedades de transmisión sexual, ya que no solemos conocer la salud de la otra persona. Por eso, es necesario hacerlo siempre con la máxima precaución. Además, debemos saber decir ‘no’ cuando toca, porque no estamos obligadas a hacer algo que no nos apetece. Para que no salgas herida, lo mejor es que tengas claro desde el principio que es sólo una relación de corte sexual.
Fuente: Nosotras
