Después de vivir el US Open con más calor y humedad de la historia, el torneo afronta el fin de semana decisivo sabedor de que va a tener una mala climatología. Así lo anuncian los expertos, que no esperan el regreso del sol hasta el próximo lunes.
Después de nueve días de competición sin apenas lluvia, que hizo acto de presencia sólo durante el partido de cuartos de final entre Simona Halep y Victoria Azarenka, la organización se vio obligada a suspender la sesión nocturna del jueves, donde estaban programadas las dos semifinales femeninas, por culpa del mal tiempo.
De esta forma, este viernes hay ración doble de tenis en las pistas de Flushing Meadows, con cuatro partidos en la categoría individual. Primero, a partir de las 11 horas de la mañana en horario de Nueva York, saltarán a la pista Flavia Pennetta y Simona Halep. A continuación está programado el partido entre Serena Williams y Roberta Vinci. Novak Djokovic y Marin Cilic y Roger Federer con Stan Wawrinka cierran el maratón del viernes.
Pase lo que pase, las dos ganadoras de las semifinales ya saben que no van a tener día de descanso para preparar la final del sábado. De igual forma, los vencedores de los dos duelos en categoría masculina saben también la previsión de lluvia y que la final podría terminar un nuevo año en lunes. Curiosamente, los jerarcas del torneo habían devuelto en 2015 la final al domingo por las quejas de los jugadores.
Y el techo retráctil de la central Arthur Ashe no estará acabado hasta la próxima edición del Abierto yanqui.
Fuente: Marca