El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, manifestó este miércoles “rotundamente” su rechazo “a cualquier solución no pacífica y a cualquier intervención exterior” en Venezuela.
Durante una comparecencia en el Congreso de los Diputados, el socialista Sánchez avanzó también que el Ejecutivo español está estudiando cómo ofrecer un estatus migratorio alternativo a los venezolanos que han solicitado protección internacional en España y que no cumplen los requisitos para obtener el de refugiado.
Más de 20.000 ciudadanos procedentes de Venezuela han solicitado protección en España en 2018, detalló el presidente, quien insistió en que su objetivo es que el país latinoamericano celebre unas elecciones libres democráticas y garantizadas porque es la “única solución posible” a la crisis que vive.
“No buscamos poner o quitar gobiernos o presidentes en Venezuela” porque eso no les corresponde, subrayó Sánchez, pero lo que sí están haciendo es trabajar para que este país vuelva a la senda democrática.
El pasado 24 de febrero no pudo entrar la ayuda humanitaria que está acumulada en las fronteras de Colombia y Brasil con Venezuela, lo que provocó distintos disturbios que causaron varios muertos.
Por su parte, desde el Gobierno de Venezuela aseguran que Estados Unidos prepara una intervención militar, afirmación que comparte también Rusia.