El actor Paul Bettany, conocido por la serie Wandavision, se transforma en un padre complicado y traumatizado por su papel en la Segunda Guerra Mundial en Here, una película «cálida de amor» que bajo la superficie trata «sobre el perdón», dijo el viernes el intérprete a EFE.
La película está dirigida por Robert Zemeckis, realizador de la emblemática Forrest Gump, que precisamente ha reunido en la gran pantalla a los protagonistas de este clásico del cine, Tom Hanks y Robin Wright, en el papel de Richard y Margaret, respectivamente.
En Here, Bettany se pone en la piel del padre de Richard, Al, un veterano de guerra «atrapado en un rol de género muy rígido» y traumatizado por sus vivencias en la Segunda Guerra Mundial; un personaje complicado con el que el actor no tardó en conectar.
El público conoce a Al con 23 años y tras volver de servir en la guerra, donde perdió la audición de un oído por culpa de una bomba: «Es un hombre muy joven que ha crecido durante el crac del 29 y está a punto de ser padre, pero no está preparado para ello», cuenta el actor.
«(Al) se centra en mantener un techo sobre sus cabezas y por ello pierde lo extraordinario de ser padre. Eso lo convierte en mal padre, pero creo que también es algo muy desgarrador», indica Bettany, de origen británico y reconocido especialmente por su interpretación de Visión en las películas de Marvel.
Una película narrada de manera inusual
Here, que está basada en la novela gráfica del mismo nombre de Richard McGuire’s, tiene una peculiaridad, y es que la historia de Richard y su familia transcurre en una sola habitación: el salón de su casa.
A lo largo del filme, el espectador ve cómo los personajes envejecen; eso sí, los actores son los mismos en todo el proyecto, pues Zemeckis usa efectos especiales para transformar sus rostros y hacerlos parecer más ancianos o más jóvenes según convenga.
Además, el director, artífice también de otras películas como Regreso al futuro o Náufrago, grabó Here con una sola cámara y desde un único ángulo para captar así una amplia visión de la vida de los protagonistas.
La historia y su inusual forma de estar narrada cautivó a Bettany desde el primer momento: «Recibí un guion de Robert Zemeckis escrito por Eric Roth, dos personas con las que siempre quise trabajar. Me senté a leerlo e inmediatamente llamé a Robert. Le dije que era el mejor guion que había leído en 15 años».
Bettany cree que, al igual que él, el público conectará con la película por su «calidez», puesto que aunque «tiene temas épicos», desprende «amabilidad» a través de los personajes, que «tratan de hacerlo lo mejor posible y amarse los unos a los otros».
«A veces fallamos en eso, y a veces tenemos éxito. Y todo esto tiene lugar en un solo espacio», añade el actor, destacando esta peculiaridad de la película.
2001