La que fuera la vigilante de la playa más popular y protagonista del mayor número de portadas en la historia de la revista Playboy, ya no se siente como en los noventa, algo que se debe en parte a que algunas personas han intentado reducir su lado sexy.
«No sé si he llegado a sentirme guapa en algún momento. Siempre siento que no lo soy, de verdad. No sé si es porque soy demasiado caliente, pero siempre intentan disminuir mi atractivo sexual. Creo que es el momento, ya sabes, creces y tu imagen cambia. Ahora me siento distinta a como me sentía en mi años de chica Playboy. Ahora creo que es el momento de decidir por mi misma lo que hago con mi imagen. Siento que me estoy haciendo vieja, eso es lo que para mí mata la sensualidad. Por algún motivo, me gusta la idea», explicó la exuberante modelo al portal de noticias Buzzfeed.
La belleza de 45 años siempre ha querido que la describan como «glamurosa» a pesar de que los productores de la serie ‘Los vigilantes de la playa’ intentaran reducir la intensidad de su atractivo.
«Mucha gente me ha hecho sentir mal, sobre todo cuando actuaba en ‘Los vigilantes de la playa’. Insistían en que no llevara pestañas postizas, pero yo siempre les decía que era mi look y que era la forma en la que me sentía cómoda. A veces las pestañas se me caían en medio del rodaje. Pero estaba decidida a ser glamurosa. Me encantaba. Pensaba: ‘Si vas a salir en la tele y lo vas a hacer lo más glamurosa posible, puedes dejar el estilo natural para dentro de casa. Si vamos a hacer esto, ¡divirtámonos!’ De hecho, tiempo después hice una sesión de fotos en la que me quitaron todo el maquillaje y me recogieron el pelo en una coleta, aunque tuve reticencias, al final me dije: ‘Bueno, vale, vamos a intentarlo'», explicó la guapa estrella./YG
Fuente:Agencias
