El campeón filipino Manny Pacquiao sigue en plena preparación de cara a la pelea de unificación del título welter con el estadounidense invicto Floyd Mayweather Jr. y mientras ya se tuvo que someter a la primera prueba antidopaje como está establecido en el contrato del multimillonario combate, informó Efe.
Aunque la información fue ofrecida hoy a través de la prensa filipina, Pacquiao, ocho veces campeón del mundo, dio muestras de orina y sangre dos días después que se anunciase de manera oficial que ambos púgiles habían acordado someterse a pruebas similares a las que se realizan en los Juegos Olímpicos.
Un especialista apareció de manera sorpresiva en el gimnasio de Los Ángeles, donde entrena Pacquiao, y le tomó las muestras de orina y de sangre.
El gran duelo entre Mayweather y Pacquiao, considerados los dos mejores boxeadores del momento, está previsto para el próximo 2 de mayo en el MGM Grand Garden Arena, de Las Vegas (Nevada).
La pasada semana ambos protagonizaron una histórica rueda de prensa, también en Los Ángeles, a la que asistieron más de 600 periodistas de todo el mundo, y por la que desfilaron en la alfombra roja colocada en el Teatro Nokia, junto a sus promotores y entrenadores.
Ambos púgiles adelantaron que están listos para la pelea que todo el mundo quiere ver y aunque tal vez tendría que haber llegado antes, ahora sigue siendo la más importante en la historia del deporte del boxeo y considerada ya como la del siglo.
De acuerdo a lo firmado en el contrato, tanto Mayweather como Pacquiao tienen que someter a la Agencia Anti Dopaje de Estados Unidos (USADA) copia de sus calendarios de entrenamientos y viajes.
Hace cinco años, las pruebas fueron eje de controversia y evitaron que el combate se celebrara, aunque ahora ha quedado demostrado que fue la excusa que puso Mayweather Jr. para que la pelea no se diese al no favorecer sus intereses deportivos y económicos.
De acuerdo a GMA News, de Filipinas, los análisis incluyen pruebas para la hormona de crecimiento humano (HGH, por sus siglas en inglés) así como la eritropoyetina (EPO), entre otras sustancias, que están prohibidas por la Agencia Mundial Antidopaje (AMA).
Mayweather y Pacquiao tienen que someterse a las pruebas posterior al combate y si fallan las mismas tendrían que pagar una multa de cinco millones de dólares, siempre de acuerdo a los informes de prensa.
Sin embargo, la multa no tendría mayor impacto económico en las multimillonarias bolsas de Mayweather Jr., que cobrara 150 millones de dólares y Pacquiao recibirá otros 100 millones de dólares.
Se espera que la recaudación por derechos de televisión de pago sean de más de 400 millones de dólares y los ingresos de taquilla de las 18.000 entradas del aforo que tiene el MGM Grand Garden Arena, supere los 50 millones de dólares, ambos nuevas marcas en la historia del boxeo.
Fuente: El Universal