Los sindicatos franceses descartan que la batalla contra la reforma de las pensiones esté perdida, pese a la adopción del impopular proyecto de ley anoche en el Senado, y advirtieron contra la «sordera» del Gobierno frente a la «cólera» creciente del mundo del trabajo.
«El partido no ha terminado», recalcó en una entrevista en la cadena BFMTV Laurent Berger, secretario general de la Confederación Francesa Democrática del Trabajo (CFDT).
Berger, uno de los dirigentes sindicales que encabeza el movimiento, recordó que el miércoles será una nueva jornada nacional de protestas, en coincidencia con la discusión del texto en una comisión mixta paritaria del Parlamento.
Ese día «hará falta» una movilización fuerte, dijo Berger, para volver a demostrar la potencia del rechazo social a la reforma.
El texto se discutirá de nuevo el día 15 en comisión mixta paritaria para acordar una versión común que deberá ser luego validada, a partir del 16 de marzo, por ambas cámaras.
EFE