Casi 500 mil indocumentados trabajan en el estado. ONGs argumentan que han recibido numerosas llamadas de estas personas preocupadas por el alcance que tendrá la nueva ley SB 1718 que entrará en vigor el próximo 1 de julio en Florida
Ada, una mexicana que emigró a Florida en busca de una vida mejor hace más de una década, enfrenta la realidad de vivir sin documentos que le otorguen un estatus migratorio válido para trabajar y residir en el estado del Sol.
Admite estar preocupada tras la aprobación de la ley SB 1718 por parte del gobernador republicano de Florida, Ron DeSantis. Esta ley, entre otras cosas, requiere que los empleadores con más de 15 trabajadores utilicen el sistema E-Verify para verificar la legalidad de su empleo. Además, impone multas diarias de hasta 1.000 dólares a las empresas que no cumplan con esta normativa. Así lo ha reseñado en reporte especial la Voz de América.
«Estoy preocupada porque soy madre soltera de dos hijos y yo soy quien trabaja y cubre todos los gastos en nuestro hogar. Si me quedo sin trabajo, todo se complica», admite Ada durante una conversación con la Voz de América. La posibilidad de mudarse a otro estado del país no está en sus planes, ya que ha establecido su vida junto a su familia en Florida. Además, explica: «Tendría los mismos problemas para trabajar en otro estado porque no tengo documentos».
Según diversas organizaciones pro-inmigrantes, la comunidad indocumentada de Florida se encuentra atemorizada ante la próxima entrada en vigor de la ley el 1 de julio.
«La comunidad está sumamente preocupada porque no comprenden cómo esta ley los afectará directa o indirectamente, especialmente en lo que respecta a sus empleos», señala Guadalupe de la Cruz, del American Friends Committee de Florida, y asegura que «muchas personas están considerando irse de Florida».
Sesiones informativas para indocumentados
En este contexto, se han iniciado diversas sesiones informativas con el objetivo de explicar detalladamente los alcances de esta nueva legislación aprobada por el gobernador de Florida.
Una de las organizaciones líderes en estas iniciativas es la Asociación Campesina de Florida. Claudia González, directora de la asociación en el área de Homestead, una zona rural de Florida donde la agricultura es el principal motor económico y muchos trabajadores son indocumentados, afirma: «Las personas que asisten a estas sesiones desean saber más sobre los detalles de la ley y qué protecciones podrían tener, pero lo más importante es discutir cómo pueden protegerse y qué deben hacer en caso de que se les soliciten documentos que no poseen».
Centroamericanos: la mayoría trabaja en el campo
La sesión informativa a la que asistieron unos treinta miembros de la comunidad de Homestead contó con la participación de representantes de los gobiernos de El Salvador y México, dado que muchos de los trabajadores agrícolas de Florida provienen de Centroamérica y del país vecino.
Según el Instituto de Políticas Migratorias, se estima que alrededor de 455.000 migrantes indocumentados trabajan en Florida. De este grupo, el 24% se dedica a la construcción, el 17% realiza tareas administrativas o domésticas, el 15% trabaja en el sector de servicios de comida, el 9% en tiendas y el 8% en otros servicios.
«Existe mucha desinformación»
José Manuel Murillo, cónsul de protección a mexicanos en asuntos legales del Consulado de México en Miami, Florida, señala que en la comunidad existe un gran nivel de estrés y preocupación debido a esta ley. Por esta razón, han decidido unirse a esta iniciativa y organizar sesiones informativas para difundir los puntos más relevantes de esta legislación.
«Nuestra primera tarea como consulado es informar a la gente. Lamentablemente, hay mucha desinformación en las redes sociales y en las conversaciones informales. Por eso, consideramos que es de vital importancia que la población reciba información oficial», afirma Murillo. Durante las próximas semanas, viajará a distintos lugares de Florida con una alta concentración de comunidad mexicana para brindar información sobre esta ley.
VF