La Mesa de la Unidad Democrática lamentó que 2013 trajera resultados “muy poco alentadores” para las relaciones exteriores de Venezuela, con el debilitamiento de la imagen del país, que la organización considera se ha aislado de las corrientes de progreso político, institucional, económico y tecnológico del mundo.
En un comunicado, la organización menciona una a una las razones por las que considera que se debilitó la imagen del país. Critica la escasa promoción, defensa y garantías de los derechos humanos por parte del gobierno: “Este año, violando los principios constitucionales, se materializó la salida de Venezuela del Sistema Interamericano de Protección de los Derechos Humanos luego de la nefasta decisión de denunciar la Convención Americana de Derechos Humanos”.
La Mesa también califica de “irresponsable” la actitud asumida por el Ejecutivo en la defensa de la soberanía nacional, en particular sobre la reclamación histórica de Venezuela sobre el territorio Esequibo y la penetración de Cuba en asuntos de gobierno.
Sobre la situación económica, la MUD lamenta que el gobierno mantenga al país con una economía poco competitiva, en la que cada vez más se reducen las exportaciones no petroleras y se desalientan las inversiones extranjeras. Además, se rechaza la “política dispendiosa en regalos al exterior, que ya comienza a hacer estragos entre los beneficiarios de esas medidas”.
La MUD critica las alianzas del gobierno con países de “escasas credenciales democráticas que desacreditan al país como “interlocutor internacional serio y confiable, o como sociedad potencial para establecerse, destinar inversiones o para turismo”.
La alianza lamenta que Venezuela se haya incorporado, en materia de comercio internacional, “al escaso grupo de países que boicotean las negociaciones internacionales que propician la eliminación de las barreras comerciales y fomentan los flujos de inversión y de comercio”.
La Mesa critica la fragmentación de los miembros de la región latinoamericana, especialmente por la acción excluyente de los miembros de la ALBA, la creación de organismos regionales que duplican sus acciones e incluso generan contradicciones y por el incumplimiento de los compromisos adquiridos, particularmente en el caso del Mercosur.
Fuente: La Verdad
