Esta es probablemente la única cita de Carlos Marx que los venezolanos con familia cubana recordaremos. La revolución cubana ha sido una tragedia que Hugo Chávez ha querido repetir pero como bien dice Marx, la repitió como farsa.
El que Cuba haya sido arrastrada en el juego de la Guerra Fría a una revolución comunista fue una tragedia. Tragedia que llevó al éxodo de mas de un millón de cubanos entre el 1959 y el 1961, a una invasión militar de Estados Unidos en Bahía de Cochinos y a un embargo económico que todavía persiste, el cual por cierto, ha servido mas para que los Castro se atornillen en el poder que a la libertad del pueblo cubano. Sí, lo de Cuba ha sido una tragedia. Lo de Venezuela es distinto, y en estos días luego de que el presidente Obama anunciara su decreto sancionando a siete violadores de derechos humanos en nuestro país, la farsa de la revolución bolivariana ha llegado al paroxismo.
Todo el que haya leído el decreto y sepa algo de la jurisprudencia en materia de política exterior norteamericana entiende que la frase dirigida a la “situación en Venezuela” en la cual el decreto lee: “constituye una amenaza inusual y extraordinaria para la seguridad nacional y política exterior de Estados Unidos” se utiliza siempre como prologo para que el presidente pueda legalmente emitir un decreto sancionando a países o personas. En este caso, no fue para sancionar a Venezuela ni mucho menos directamente el pueblo venezolano sino a siete funcionarios que claramente han violado los convenios internacionales de Derechos Humanos firmados por el propio gobierno venezolano.
Ignorando muy a propósito este hecho real y siguiendo a pie juntillas el libreto de su farsa, el gobierno “revolucionario bolivariano” pretende compararla eliminación de las visas a estos funcionarios para que no vayan a Disney World con la tragedia de Bahía de Cochinos. Qué riñones hay que tener…Por eso salen a rasgarse las vestiduras con ridículos ejercicios militares a ver si logran el propósito de sustituir a Cuba en su papel de víctima del continente y en su narrativa de David contra Goliat. El problema de Nicolás es que ni Raúl quien esta muy ocupado negociando con Obama se cree el show que ha montado. Por favor señores esto es una farsa, abran los ojos para que el cardenal Urosa, con todo respeto, tampoco vuelva a equivocarse.
Igualmente, los revolucionarios de puro embuste que gobiernan a mi país pretenden repetir la tragedia del bloqueo económico a Cuba impuesto hace mas de 55 años por Estados Unidos. Quieren hacerlo con la farsa de una supuesta “guerra económica” inventada por ellos para tapar su corrupción e ignorancia. Los invito a que sigan haciendo la lista ustedes entre la tragedia cubana y la farsa venezolana porque hay material de novela.
Ahora bien, imaginemos que la frase en la cual Obama define a la situación en Venezuela como una “amenaza inusual a la seguridad de Estados Unidos” no sea un requisito constitucional. En otras palabras, que Obama tendría que dar una lista de las razones por las cuales este despelote venezolano -porque de revolución de verdad ya sabemos que no tiene nada- constituye una amenaza a la seguridad de los Estados Unidos. Yo me voy a aventurar a dar algunas y ustedes pueden continuarla porque al igual que mi punto anterior aquí también las razones pican y se extienden.
Por ejemplo, yo diría que constituyen una amenaza para la seguridad nacional y la política exterior de Estados Unidos: las toneladas de droga que salen de Venezuela con la mirada cómplice de muchos de los que están en la lista de Obama, los pasaportes venezolanos emitidos a terroristas que han sido detenidos, el creciente número de venezolanos que llegan a Estados Unidos pidiendo asilo político, el uso del sistema financiero norteamericano para depositar dineros producto de la corrupción y el narcotráfico, los miles de venezolanos que se han quedado sin pasaporte en Florida porque el gobierno de Chávez decidió cerrar el consulado para que los venezolanos de Florida no pudieran votar, el abierto encompichamiento de este régimen con Irán y con Rusia, las amenazas de disminuir a un mínimo los funcionarios de la embajada de Estados Unidos en Caracas lo cual agravaría todo lo anterior etc, etc, etc. Dada esta lista en mi criterio, el gobierno de Obama tiene la potestad de anular las visas de comprobados corruptos y violadores de derechos humanos y de congelarle sus bienes en Estados Unidos, sobre todo porque además se lo pidió el Congreso.
Mi familia cubana sufrió y sufre una tragedia mientras que en Venezuela vivimos una farsa construida por el chavismo de abundante chequera y cero ideología que ahora se quedó sin chequera. El show no da para mucho más.
Para terminar, quiero citar a don Rómulo Gallegos quien desde el hotel San Luis de mi abuelo en La Habana escribió en su exilio La brizna de paja en el viento”:
“Le entrego a Cuba este libro en las manos … de Raul Roa
en las de los estudiantes universitarios, que padecieron y superaron la tragedia de la cultura que aquí comparto con ellos en mi modo natural de expresión y en ejercicio de la fe que tengo puesta en la juventud intelectual de los pueblos de nuestro espíritu y nuestra lengua.”
Nunca me imaginé que sesenta años después, serían los estudiantes venezolanos en la lucha contra otro régimen dictatorial, el de Chávez y Nicolás Maduro, quienes responderían a esa convicción expresada por Rómulo Gallegos desde la Cuba de los 50 en los deseos libertarios de los jóvenes de América Latina.
Por ellos, los presos, los mártires y los que siguen luchando por su libertad tengo la seguridad de que pronto acabaremos con esta farsa. Revolución sin juventud no existe.
Ana Julia Jatar