logo azul

Delinquir, robar, matar, mentir…

Categorías

Opiniones

Delinquir, robar, matar, mentir…

“Refleja el nivel de degradación al cual llega una cultura cuando sus dirigentes tienen que sentarse a fijar posiciones, unos para defender o encubrir y otros para evidenciar o denunciar algo más que actos transgresores. Lo que está en discusión entre partes es “razón” y “validez” de una “política pública” que se instaló hace años y que promueve lo más oscuro del ser pensante.

 

En este país delinquir, robar, matar, mentir, humillar, degradar, insultar, burlarse del pobre, aturdir al humilde y aterrorizar son actos aplaudidos, fomentados y defendidos. En Venezuela los objetivos, acuerdos y diálogos no están dirigidos a temas fundamentales como mejorar la educación, la salud, los servicios públicos, la estabilidad económica, la moral y el fomento de la dignidad humana. No, el “diálogo” y “reconciliación” se enfoca en fijar posiciones, discutir y tratar de vencerse los unos a otros con argumentos que permitan dejar bien claro quién tiene la razón en lo referente a los excrementos! ¡Ah! Y si son o no excrementos. Luis José Uzcátegui, El Universal, 05 /2013.

 

La España del taconeo

En la España cotidiana aparecen banqueros, alcaldes, falsos héroes que son detenidos, llevados a juicio o directamente enviados a la cárcel porque robaron, mataron, vaciaron las cajas fuertes o apoyados en un nombre o en un prestigio familiar se montaron una vida de reyes para aparecer en la Revista ¡HOLA! en la cual suelen figurar todos los bribones de cuyas historias se alimentan semanalmente nada menos que 4 millones de lectores, incluyendo a esta columnista. Y es que una no puede reprimir el morbo al leer las culebrónicas historias de la familia Ruiz Mateos y las rocambolescas aventuras de Ignacio Urdangarín quien no termina de sorprender con su rosario de tuiters, facturas falsas y contratos millonarios en donde deja la huella de su ambición de Infante-Duque de Palma consorte que lamentablemente comparte negocios con Cristina la hija del rey don Juan Carlos, a quienes estrictos abogados han hecho saber que los ricos y poderosos aun cuando tengan muchos euros para pagar defensas, serán tocados como cualquier peatón de sangre roja.

 

Y ahí está la pobre Infanta Cristina, tratando de no esconderse y dejando que las revistas del corazón la sorprendan en una que otra ceremonia oficial, mostrando su cara amable para hacer creer que todo el embrollo de su marido, es cosa de él, no suya. Los magistrados no se lo creen y sin miramientos han demostrado su independencia para sancionar a quien venga, así que a la señora dueña del equipo Vallecano, esposa de Ruiz Mateos le han anticipado 42 años de prisión que no podrá cumplir porque ya es ochentona. Ruiz Mateos y sus seis hijos compraron media España y ahora los acusan “por alzamiento de bienes y administración desleal”, con miras también a compartir rejas con Ortega Cano, acusado de matar a un hombre decente que regresaba a su hogar mientras el torero manejaba por la autopista, luego de una noche de copas, una noche loca.

 

Entre tuiters y videos

Pues si en la madre patria, la mayoría de los jueces se aprietan la dignidad para hacer justicia y otros se inhiben elegantemente, aquí, pasa nada y de chiripa la doctora Luisa Ortega asignó a un fiscal para investigar el caso Mario Silva que ella en un comienzo calificó como jugarreta de la oposición, mientras gente seria del movimiento chavista como es el profesor de ciencias políticas de la UCV José Silva, abogado y criminólogo, para nada familiar del acusado, se negó a creer que lo del padre de La Hojilla fuera un montaje,” porque no tiene fisuras, no tiene baches, es prácticamente perfecta”. Maduro la calificó como “una imbecilidad de la derecha imbécil”. Ayer, Silva fue a declarar y salió, como siempre ha sido su costumbre “por la puerta de atrás”.

 

La segunda parte de su grabación contiene 50 tuiters en los cuales dialoga con un supuesto “hacker” a quien le comenta asuntos personales de su actividad como revolucionario, confesiones de sus fechorías, chismes baratos y la seguridad de que su servilismo con el comandante fue siempre el de husmear, comunicar y traficar con personas de baja calaña para cumplir con las metas pautadas para una patria rojo encendido, contando con malas “patas”, así lo expresó en su lenguaje de alto vuelo. Silva se irá a un exilio dorado, quizá Cuba, después de haber señalado a Cabello con los epítetos que aquí no se deben publicar, pero de ladrón para abajo, nada bonito le expresó.

 

A bailar tarantella

Y el remate de la semana lo proporcionó el diputado Juan Carlos Caldera con un video-conversa para destapar la olla podrida que siempre ha estado sobre la estufa de Ruperti, condecorado con la gran banda del Libertador por sus grandes servicios a la patria, entre ellos sobornar a todo tipo de personas para lograr sus propósitos. Entiendo que a Caldera le ofreció un dinero para apoyar la campaña de Capriles y que la misma fue recibida ¿o fue devuelta? No sé cómo quedará Caldera en esta contienda pero la grabación del conversatorio telefónico del cavalieri Ruperti muestra de qué fibra está hecho el empresario, dispuesto siempre a comprar conciencias y en esta oportunidad cayó uno de los rojitos cuya pretensión era la de ganar la gobernación del Zulia a punta de rupertis, pero se le adelantó Chávez con su pana de El Samán de Güere y ya sabemos lo que ocurrió. Los tuiters rupertianos con fondo orquestal suenan a pura tarantella danza popular del sur de Italia. (Sicilia) vocablo que proviene de la palabra taranto (tarántula). Se dice que al ser picado por uno de estos insectos ponzoñosos a las personas se les hace bailar hasta que eliminan el veneno por medio del sudor. ¿Quién bailará la próxima?…

 

Por Mariahé Pabón

Comparte esta noticia:

Contáctanos

Envíe sus comentarios, informaciones, preguntas, dudas y síguenos en nuestras redes sociales

Publicidad

Si desea obtener información acerca de
cómo publicar con nosotros puedes Escríbirnos

Nuestro Boletín de noticias

Suscríbase a nuestro boletín y le enviaremos por correo electrónico las últimas publicaciones.