Grupos paramilitares han sido los responsables de 48 ataques contra periodistas y medios de comunicación desde febrero pasado. Así lo denunciaron el Observatorio Venezolano de Conflictividad Social y el Instituto Prensa y Sociedad (IPYS), en un informe publicado hoy, el cual alertaron sobre el incremento de la violencia contra los trabajadores de los medios de comunicación que se ha registrado desde el inicio de las protestas estudiantiles y la consecuente represión oficial.
En el reporte se asegura que grupos irregulares, algunos autodenominados como colectivos, afectos al Gobierno actuaron contra 416 manifestaciones, en las cuales se produjeron fallecidos y heridos ante la mirada complaciente de las autoridades.
«31% de las protestas en el mes de marzo registraron ataques de paramilitares. Lo que pone en evidencia el rol destacado de las células paramilitares en el patrón de represión que viene desarrollando el Gobierno de Venezuela en contra de manifestantes pacíficos», concluyeron las agrupaciones.
Los grupos parapoliciales o paraestatales han sido utilizados por regímenes autoritarios como el facismo italiano, el nazismo alemán, la dictadura cubana o la panameña de Manuel Antonio Noriega para acallar a la disidencia por la violencia y así salvar la responsabilidad del Estado alegando que son individualidades quienes actúan.
Tras afirmar que estos ataques han afectado la cobertura informativa, el Observatorio e IPYS informaron que en 10 estados del país han registrado la actuación de estas agrupaciones, las cuales han ejecutado «un secuestro. Además, ocurrieron prácticas de intimidación y persecución, agresiones físicas, amenazas de muerte, robo de información, daños a las herramientas de trabajo y a la infraestructura de medios de comunicación».
En el informe se cuestionó el llamado que el presidente Nicolás Maduro hiciera en febrero pasado a los colectivos afectos a su Gobierno para que ayudaran a la policía y a la Guardia Nacional a enfrentar las protestas, bajo la frase de su predecesor, el fallecido Hugo Chávez, de «candelita que se prenda, candelita que se apaga».
Fuente: EU