El pasado fin de semana hubo un adelanto en Caracas. Salas atestadas de niñas y adolescentes. Ambiente de concierto. Gritos para la primera cuña publicitaria y hasta para el Pegaso de la compañía distribuidora Tristar. Topes de decibeles para los torsos desnudos, y si retozan perezosos entre sábanas, se rompe la barrera del sonido. Lágrimas y exclamaciones de “¡ay, qué bello!” para los testimonios de los familiares que les echan de menos, los relatos de aquel primer beso detrás del árbol o de las vidas que llevarían como bomberos o panaderos si no integraran una banda que les ha reportado ganancias personales de más de 40 millones de dólares.
Por supuesto, cuando se mete en su camerino a saludarles el director de cine Martin Scorsese, que ya había dirigido 10 obras maestras cuando el mayor de ellos no había nacido, nadie chilla.
Para el que no está familiarizado con la “1D-manía”, el primer reto de Así somos¸ el documental en 3D de One Direction que se estrena con todas las de la ley el viernes, es memorizar los nombres, distinguir a los cinco integrantes del grupo juvenil británico y detectar cuál arranca más aullidos. Quizás el favorito es Harry Styles, el de los rulos despelucados, pero también está Louis Tomlinson, el de la cara de hacer maldades y el cabello de copete. Tampoco hay que descuidar a Zayn Malik, aparentemente el más espigado y maduro. Un poco más rezagados, aunque también con sus fans, se sitúa el rubio con aspecto de hermanito menor, Niall Horan, y el muchacho fuerte de corte militar, Liam Payne.
Entre suspiros, desfilan las fotos de cuando eran niños y, según ellos, soñaban con ser cantantes. Juegan fútbol antes de empezar una gira en la Arena 02 de Londres. El documental, dirigido por Morgan Spurlock, el mismo que denunció la comida chatarra en Super Size Me (de algo tiene que alimentarse), muestra cómo se les armó a partir de un concurso de televisión, pero que a pesar de ello son un grupo juvenil distinto a los demás. Quizás porque tienen ese simpático gamberrismo de clase media británica, no saben bailar coreografías, usan la ropa más ordinaria del mundo y les caracteriza una palabra que el español nunca traduce adecuadamente: “cool”.
Van pasando “Up All Night”, “One Thing”, “What Makes You Beautiful”, “She’s Not Afraid”, “Live While We’re Young”, “Teenage Dirtbag”, el cover de “One Way or Another”, “Last First Kiss” y las baladas con guitarrita como “Little Things”, “Change My Mind” y “Over Again”. Un científico escinde la réplica de un cerebro humano y explica que las adolescentes, como las venezolanas en esa sala de cine, no están locas, sino que tienen activados circuitos de un inmenso y saludable placer. “Sé que me quieren, aunque no me conocen”, resume una de las fans entrevistadas en Así somos.
En Tokio, los paparazzi no saben pronunciar “Harry”. Los muchachos siguen jugando fútbol, esta vez con roboticos. La gira continúa por Francia, Alemania, Suecia. Hacen desastres con un montacargas. Pescan en un bote en Dinamarca. Entrenan con Cristiano Ronaldo, que también se lleva su empanada de gritos. Estremecen a la ancestral Verona, la de Romeo y Julieta. Liam se toma un día libre para la boda de su hermano (chillidos). Zayn le compra a su mamá una casa bella. Louis abraza a su abuelita. Niall asegura que son “chicos normales con un trabajo anormal”. Se disfrazan de empleados de seguridad para reírse de ellos mismos y de algunas fanáticas antes de un show. Alrededor de una fogata, reflexionan sobre la juventud. Prometen que nunca se separarán: “Gracias a One Direction, conocí a mis cuatro mejores amigos”. Recuerden devolver los lentes después de la función.
One Direction: Así somos (One Direction: This Is Us)
Documental. Gran Bretaña, 2013
Director: Morgan Spurlock
1 hora y 32 minutos
Desde el viernes 27 de septiembre
Salas 3D de Cines Unidos y Cinex.
Fuente:El Nacional