Gloria Abraham Peralta, presidente de las negociaciones en la Organización Mundial del Comercio (OMC) de productos agrícolas instó el jueves a los países a cerrar un acuerdo «significativo» durante la conferencia ministerial de fines de 2021 en Ginebra.
Las discusiones sobre la reforma del comercio de estos productos empezaron en la OMC a principios del 2000, y los países siguen debatiendo.
En la Conferencia ministerial de Nairobi de 2015, los miembros de la OMC tomaron la decisión histórica de eliminar las subvenciones a la exportación de productos agrícolas. Se trata de la reforma más importante de las reglas comerciales internacionales en el sector de la agricultura desde que fue instituida la OMC.
Pero «aún queda mucho camino por recorrer para mejorar el funcionamiento de los mercados de los alimentos y la agricultura», declaró este jueves a la prensa la presidenta de las negociaciones en la OMC sobre el comercio de productos agrícolas, la embajadora Gloria Abraham Peralta, de Costa Rica.
«En particular, estos mercados siguen estando muy distorsionados y protegidos, y los productores y consumidores más vulnerables de los miembros, que son países en desarrollo, son los que pagan el precio más alto», agregó.
El 29 de julio, Abraham Peralta presentó un proyecto de texto de negociación -que no fue hecho público- para identificar los puntos posibles de consenso y obtener un resultado sobre la agricultura en la 12ª Conferencia ministerial de la OMC, que se inicia a fin de noviembre en Ginebra.
El texto abarca siete temas de negociación en el tema de la agricultura: el apoyo interno (de los países en favor de los productos agrícolas), el acceso a los mercados, las restricciones a la exportación, la competencia a la exportación, el algodón, la posesión de reservas con fines de seguridad alimentaria y un mecanismo de salvaguardia especial, además de un tema transversal, la transparencia.
Abraham Peralta no precisó cuáles eran los ámbitos que pueden permitir un acuerdo, pero subrayó que hay dos temas en particular que generan divergencias: el apoyo interno y la posesión de reservas con fines de seguridad alimentaria.
La embajadora instó a los países a encontrar rápidamente un acuerdo, de cara a las negociaciones sobre la agricultura, que se reanudarán el 7 y 8 de septiembre.
«El tiempo es escaso, pero confío en la voluntad y la capacidad de los miembros para comprometerse entre sí y demostrar la flexibilidad necesaria para lograr un resultado significativo. Mi papel es facilitar este proceso y haré todo lo que esté a mi alcance para ello», aseguró la presidenta de las negociaciones.
Fuente: Banca y Negocio
Por: Maria Laura Espinoza
Twitter: @i_am_LauEz14