Unas ochocientas personas que habían comprado entradas para el concierto que la cantante estadounidense Madonna ofreció anoche en Turín (norte de Italia), desistieron de acudir al evento, que se desarrolló entre fuertes medidas de seguridad, dijo a Efe una fuente de la organización.
«Se registraron unas 800 entradas menos con relación a las compradas, por lo tanto se puede decir que corresponden a las personas que no se presentaron», declaró una portavoz de Live Nation, la organización del concierto de la cantante.
El primer concierto de Madonna en Turín en su gira mundial «Rebel Heart Tour» comenzó dos horas y media más tarde de lo previsto, en torno a las 22:30 horas locales (21:30 GMT) en el estadio cubierto Pala Alpitour, entre fuertes medidas de seguridad y controles en los accesos al lugar.
El reforzamiento de la seguridad en torno al evento musical fue anunciado por las autoridades de la ciudad después de los ataques terroristas de hace una semana en París y al concierto de anoche asistieron finalmente algo más de once mil personas.
Los organizadores del concierto no ofrecieron su interpretación sobre las razones que pudieron llevar a las personas que habían adquirido entradas para no asistir finalmente al evento, pero medios locales las relacionan con la preocupación, manifestada durante los días precedentes, por asistir a un evento masivo tras los sucesos en la capital francesa.
Madonna comenzó su concierto con un «Ciao Italia, let’s go» (Hola Italia, vamos) y la interpretación de «Iconic» delante de la proyección de imágenes del exboxeador Mike Tyson, y en él ofreció una mezcla de temas de su último álbum «Rebel Heart» y de toda su carrera.
«La isla bonita», «Who’s that girl», «Into the groove», «Vogue», «Deeper and deeper», «Don’t tell me» (tema que sustituyó en este concierto en Italia a «Ghost town», que sí figura en el resto de la gira mundial) y «Music» fueron algunos de los temas que interpretó la cantante de Michigan y que terminó con «Holiday», envuelta en la bandera de Italia.
«Soy medio italiana y a los italianos no les gusta que les digan qué hacer, así que nadie me va a decir cuándo tengo que parar», dijo Madonna antes de comenzar la interpretación de «Don’t tell me» en un concierto en el que lanzó un ramo de flores entre el público que recogió un espectador que se presentó como Gianluca y al que, entre bromas, le propuso matrimonio porque, dijo, «estoy buscando marido», como pudo comprobar Efe.
Madonna tiene previsto todavía actuar dos noches más en Turín -mañana y el domingo- en la que es única etapa de su gira mundial, que comenzó el pasado 9 de septiembre en Montreal (Canadá).
EFE