El líder palestino condenó los disparos de dos cohetes que desde Gaza impactaron al sur de Israel. El miércoles, Obama resaltó la alianza «eterna» de EEUU con Tel Aviv.
Dos misiles provenientes de la Franja de Gaza estallaron al sur de Israel en la mañana de este jueves, cuando la comitiva estadounidense se preparaba para el encuentro entre Barack Obama y Mahmud Abbas, presidente de la Autoridad Palestina en la localidad de Ramalá, Cisjordania.
Obama llegó poco antes de las 11H00 (09H00 GMT) a bordo de su helicóptero Marine One a la sede de la presidencia en Ramala, donde fue recibido por Abbas para una reunión de hora y media.
Tras la reunión bilateral ambos presidentes darán una conferencia de prensa programada para las 11:30 GMT.
El conflicto entre Israel y Palestina estará en el foco de este tramo de la visita de Obama, aunque, según informó la Casa Blanca, el presidente discutirá «asuntos de manera general».
Este miércoles, en un discurso pronunciado en Israel, Obama dijo: «La paz debe llegar a Tierra Santa. Nunca perderemos de vista la paz entre Israel y sus vecinos árabes, especialmente palestinos».
En la Mukata o sede de la Gobernación, donde se desarrolla la reunión con Mahmud Abbas, la aglomeración de periodistas comenzó poco después del amanecer por las estrictas medidas de seguridad del servicio secreto estadounidense.
Cómo hará Obama el camino de Jerusalén a Ramalá, separadas por apenas 15 kilómetros, es un secreto que se mantiene en la máxima reserva, como medida de precaución.
Pasado el mediodía, a las 15 GMT, el presidente de los Estados Unidos pronunciará un discurso en el Centro Internacional de Convenciones de Jerusalén dirigido «al pueblo israelí».
El auditorio donde hablará Obama tiene una capacidad de 3.104 espectadores y es el más grande de Medio Oriente. Se destacará en el lugar la presencia de más de 600 estudiantes universitarios.
El viernes antes de partir a Jordania, Obama depositará ofrendas en el cementerio nacional israelí del Monte Herzl y en el monumento sobre el Holocausto de Yad Vashem. Tras estos actos, el presidente estadounidense realizará una visita a la Iglesia de la Natividad en Belén, templo sagrado para el cristianismo ubicado en territorio palestino.
En Jordania, Obama se reunirá con el rey Abdalá II, con el que revisará el camino de reformas «políticas y económicas» necesarias en un país que experimentó también las muestras de descontento social de la primavera árabe.
Asimismo, el mandatario de EE.UU. hablará sobre el conflicto sirio y la importancia de Jordania como mediador y apoyo a la oposición contra el presidente sirio, Bashar Al Assad, aunque no tiene previsto reunirse con refugiados.
Fuente: Infobae
