Nadie ve la televisión. George W. Bush tuvo una audiencia de 60 millones de personas cuando pronunció su Discurso sobre el Estado de la Unión en 2002, tras los atentados del 11-S. Bill Clinton solía alcanzar los 50 millones en los 90.
Es posible que hoy no pasen de los 31 ó 32 millones de estadounidenses los que conecten en algún momento del Discurso para ver a Barack Obama.
Así que, ante la fragmentación de las audiencias, la Casa Blanca ha optado por una doble estrategia. Primero, ha filtrado varias de las principales medidas de la intervención presidencial. De modo que, cuando Obama hable buena parte del contenido del mensaje ya se habrá dado a conocer y se llevará debatiendo desde hace días.
La segunda pata es el equivalente de que Mariano Rajoy se dejara entrevistar por los participantes de Gran Hermano VIP tras el Debate sobre el Estado de la Nación. Solo que en vez de ‘celebrities’ más o menos ‘freak’, Obama ha optado por ‘freaks’ de YouTube, el portal de Google en el que la gente cuelga vídeos.
La razón de eso es que una gran parte de las propuestas económicas que Obama va a hacer se dirigen a la población más joven, es decir, los llamados ‘Millenials’, que nacieron entre principios de los ochenta y principios del siglo XXI. Y esa generación no ve la televisión. En vez de eso, ve el iPad y el iPhone (en EEUU los dispositivos de Apple son tan o más populares que los Android).
Por eso, Obama da tres entrevistas el jueves a otras tantas estrellas de la mayor televisión del mundo, que no es ninguna gran cadena estilo CNN, Fox o NBC, sino YouTube.
Esos entrevistadores provocan escalofríos entre los periodistas de toda la vida y, en general, entre todo el que sepa leer y escribir. O, incluso, ver y oír. Uno es GloZell Green, que se hizo famosa por colgar un vídeo en el que se tragaba un cucharón de canela en polvo y se pasaba dos minutos esputando. Con 42 millones de visionados, aquí tiene usted esta joya del séptimo arte. Einsenstein y Griffith deben de estar revolviéndose en sus tumbas:
Y, si desea ver más maravillas de GloZell, aquí la tiene en una bañera llena de leche con cereal:
El segundo entrevistador es Bethany Mota, entre cuyas apariciones estelares está ‘Cómo estar guapa después de haber ido al gimnasio’ o éste, en el que explica trucos para arreglarse el maquillaje y el pelo si se está yendo tarde a clase:
El último es Hank Green, cofundador del canal de YouTube VlogBrothers, que tiende a tratar cuestiones más serias, aunque eso no impide que cuente con creaciones de la talla de ‘Catorce hechos sobre los pedos para mis amigos flatulentos’:
Cada una de estas figuras del periodismo online tendrá diez minutos para entrevistar a Obama y hacerle preguntas extraídas de las redes sociales.
Es una estrategia que al inquilino de la Casa Blanca le ha dado excelentes resultados en el pasado, como quedó de manifiesto cuando en 2012, antes que hablar con ningún medio tradicional,transformó la primera entrevista de su campaña para la reelección en un ‘chat’ en la red social Gawker, bien conocida entre los universitarios estadounidenses como un foro para colgar noticias estrambóticas y fotos de novios y novias desnudos, y cuyo eslogan es ‘Los cotilleos de hoy son las noticias de mañana’ (‘Gawker’ significa algo así como ‘quedarse con la boca abierta’).
Fuente: El Mundo.es
PABLO PARDO Corresponsal Washington