El presidente estadounidense, Barack Obama, aseguró hoy que «Corea del Norte es también una amenaza para EEUU» ante la posibilidad de una cuarta prueba atómica, y amenazó con «más sanciones» a Pyongyang en respuesta a sus «provocaciones».
«Corea del Norte no es sólo una amenaza para nuestros aliados en la zona, también es una amenaza para EEUU», afirmó Obama en una rueda de prensa en Seúl en la que apuntó que no se puede «bajar la guardia» ante las amenazas «irresponsables» de Pyongyang, indicó Efe.
Sus declaraciones llegan después de que Seúl confirmara hoy los indicios de una próxima nueva prueba nuclear de Corea del Norte.
«Corea del Norte está plenamente preparada para realizar un nuevo test nuclear», aseguró la presidenta surcoreana, Park Geun-hye, en su rueda de prensa conjunta con Obama, aunque añadió que no se sabe cuándo se producirá.
Además, la jefa de Estado afirmó que una cuarta prueba nuclear norcoreana (las anteriores tuvieron lugar en 2006, 2009 y 2013) «cambiaría el panorama de Asia Oriental» y podría acarrear un grave castigo a Corea del Norte.
El líder de la Casa Blanca, por su parte, cree que EEUU y sus aliados deben presionar más al régimen norcoreano para que no lleve a cabo ensayos nucleares y de misiles, y también se mostró partidario de aplicar «más sanciones» al país comunista como respuesta a sus «provocaciones».
Obama también aludió a China, tradicional aliado y principal valedor económico de Corea del Norte, al destacar que posee «la influencia más significativa» sobre el Gobierno de Kim Jong-un.
El presidente estadounidense aseguró que su homólogo chino, Xi Jinping, «también reconoce que Corea del Norte es un problema para la seguridad» de la región, por lo que instó a Pekín a presionar a Pyongyang hacia su desnuclearización.
En todo caso, Barack Obama expresó su deseo de encontrar «una solución dialogada» al problema, aunque reconoció que EEUU no variará su postura de exigir a Corea del Norte que demuestre «un compromiso serio de desnuclearización» con pasos concretos antes de iniciar cualquier tipo de negociaciones.
La visita a Corea del Sur de Obama, que llegó procedente de Tokio como parte de su gira asiática, se produce después de dos meses de tensión con Corea del Norte por los ejercicios militares de Seúl y Washington en territorio surcoreano y la respuesta de Pyongyang con el lanzamiento de misiles al mar.
El dirigente se reunirá mañana con empresarios surcoreanos y visitará a las tropas estadounidenses en el país antes de continuar su gira en Malasia y Filipinas hasta el próximo martes.
Agencias