Es una medida de «atrevida pero necesaria», señalaron desde el gremio médico local. El archipiélago pasó mucho tiempo protegido de la pandemia, debido a las estrictas medidas en las fronteras, sin embargo, la aparición de la variante delta, mucho más contagiosa, cambió la situación.
Nueva Zelanda anunció este lunes que la mayoría de trabajadores de la salud y profesores no podrán ejercer su actividad si no han sido vacunados contra el covid-19.
“No podemos dejar nada al azar, por eso hacemos que sea obligatorio”, declaró Chris Hipkins, ministro a cargo de la lucha contra el coronavirus y también titular de Educación.
Los médicos, enfermeras y otros trabajadores sanitarios que estén directamente en contacto con los pacientes tendrán que estar completamente vacunados antes del 1 de diciembre. El personal de enseñanza en contacto con los alumnos deberá haber recibido las dos dosis antes del 1 de enero.
El Colegio Real de Médicos Generalistas de Nueva Zelanda apoyó esta iniciativa y su presidenta, Samantha Murton, calificó la medida de “atrevida pero necesaria”.
“La vacunación sigue siendo nuestra herramienta más eficaz para protegernos contra los contagios y las enfermedades”, dijo.
Durante meses, el archipiélago estuvo protegido de la pandemia, debido sobre todo a las estrictas medidas en las fronteras. Pero la aparición en agosto en Auckland de la variante delta, mucho más contagiosa, cambió la situación.
Pese a las medidas de confinamiento, el covid-19 se está propagando a las provincias vecinas de Northland y Waikato.
La semana pasada, la primera ministra Jacinda Ardern reconoció que la estrategia de “cero covid” que hasta ahora regía en el archipiélago no permitió frenar la transmisión del virus.
AFP