La decisión es definitiva: los importadores de vehículos no recibirán este año licencias de importación, por lo que las esperanzas de reanudar actividades quedaron pospuestas para el 2015, lo que contribuirá de manera contundente en la caída del mercado automotor para este año.
Así lo dio a conocer el Ministerio de Comercio a través del viceministro de Comercio Exterior, Jhonny Saavedra, durante una reunión sostenida esta semana con los importadores asociados a la Cámara Venezolana Automotriz (Cavea), a quienes informó que la decisión obedece a la no disponibilidad de divisas suficientes para atender las necesidades del sector.
“Se nos informó que las divisas están restringidas a bienes prioritarios como alimentos y medicinas, por lo que no hay disponibilidad para otros sectores”, señaló una fuente cercana que estuvo presente en la reunión y que solicitó el anonimato.
La fuente resaltó la disposición de Saavedra a cooperar con el sector pues conoce la situación que padecen los importadores. De hecho, habría solicitado a la Vicepresidencia Económica (dirigida por el ministro de Energía y Petróleo , Rafael Ramírez), una excepción para permitir la importación de unas 200 unidades para cada marca antes del cierre de este año, solicitud que aún no ha tenido repuesta.
De cualquier manera, es un hecho que este año las aproximadamente 18 empresas que participan del mercado de vehículos importados no podrán traer carros terminados al país, así como tampoco las siete ensambladoras privadas que existen en Venezuela.
De hecho, las estadísticas de la Cámara Automotriz de Venezuela (Cavenez) dan cuenta de una casi total desaparición del mercado de importados, toda vez que al cierre de julio el total de autos procedentes de otros países vendidos este año apenas suma 73 unidades, una caída de 99,7% frente a las 22.637 comercializadas en el mismo lapso de 2014.
Tras solicitar la comprensión de los distribuidores, el viceministro de Comercio Exterior recordó que el próximo mes de septiembre tendrán oportunidad de presentar su plan de negocios y necesidades de licencia para el próximo año, cuando se espera que la disponibilidad de divisas permita satisfacer los requerimientos de los importadores.
Para nadie
La situación de escasez de divisas es tan crítica, que ni siquiera el propio Gobierno ha podido realizar importaciones directas como en años anteriores, y el arribo de autos terminados se ha limitado a unidades Chery adquiridas a través de convenios establecidos entre los Gobiernos de China y Venezuela.
No obstante, fuentes extraoficiales aseguran que la negociación para el arribo este año de 13.000 carros Chery fue suspendida, en atención a una petición hecha por trabajadores y representantes de las ensambladoras locales, quienes solicitaron al Ejecutivo limitar la importación de autos chinos en aras de apoyar la producción nacional.
De acuerdo con datos del sector, durante los primeros siete meses del año la producción nacional se derrumbó 84% respecto al mismo período de 2014, lo que se traduce en que este año las siete ensambladoras locales solo han producido 7.023 unidades.
Jesús Hurtado.-
EL MUNDO