Médicos sin Fronteras informó que cerca de 7.000 menores están en riesgo. En el norte del país está en alerta. Por la represión, el sistema de salud está colapsado
Médicos sin Fronteras advirtió que la cifra es preocupante pero podría ser aún más grave, pro la cantidad de casos que no han logrado documentar.
La organización informó en un comunicado que sus equipos vacunaron a más de 75.000 niños en las provincias de Aleppo, Ar-Raqqah e Idlib para intentar acotar la expansión de la enfermedad. Asimismo, sostuvo que la tarea es cada vez más dificultosa a raíz de los combates y el colapso del sistema sanitario.
«El principal factor que ha llevado a que la situación empeorara y a (que hubiera) brotes ha sido la perturbación de las actividades de inmunización de rutina», estimó MSF.
En 2010, se habían registrado sólo 13 casos de sarampión en el país y en 2011 se registraron 26, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
«Aparte de las víctimas directas de la violencia en Siria, los índices de mortalidad están aumentando, en particular para los más vulnerables, debido a la falta de medidas preventivas como la vacunación y a la falta de acceso a atención médica básica», afirmó MSF.
Fuente: Infobae