Un oftalmólogo de Hong Kong quiere operar al pequeño de 6 años que conomvió al mundo. «¿Por qué está todo oscuro?», preguntó, sin saber que había sido atacado
La historia de Guo Bin horrorizó a China y al mundo, luego de que se difundieran las imágenes suyas con el rostro vendado, sin entender por qué ya no podía ver.
Si bien en un primer momento se pensó que se trataba de un caso de tráfico de órganos -práctica creciente en el país-, posteriormente se descubrió que había sido víctima de un salvaje e inexplicable ataque de locura de su tía, que se suicidó días más tarde.
Pero en medio de tanto dolor, la familia del niño encontró una luz de esperanza: su hijo podría recuperar parcialmente la vista gracias a Dennis Lam, un médico de Hong Kong que se ofreció a operarlo e implantarle dos «ojos electrónicos».
«Su historia me disgustó mucho y pensé cómo podría ayudarlo. Nuestra mayor recompensa como oftalmólogos es el momento en el que nuestros pacientes recobran la vista», explicó a la AFP.
Sólo resta la aprobación de los familiares de Guo Bin, que deberían trasladarlo a Schenzhen, en el sur de China, donde podría ser operado la próxima semana.
Fuente Infobae