Como muchos hombres suelen afeitar sus bigotes, quienes conviven con perros a menudo sienten curiosidad por saber cómo quedarían sus mascotas sin esos pelos característicos de la cara.
Algunos amos, convencidos de que sin bigotes sus animales se ven más bellos, suelen cortarlos sin sospechar que esta práctica perjudica de forma considerable al ejemplar.
A raíz de esto, pues, hoy hemos decidido aportar información sobre los bigotes caninos a fin de despejar dudas y proporcionar datos que les permitan ampliar sus conocimientos y mejorar su labor como dueño de un perro.
En primer lugar debemos aclarar que, en los canes, los bigotes no cumplen funciones estéticas sino que son recursos que complementan a los sentidos del tacto y olfato. Si uno se los corta, los ejemplares pierden parte de sus habilidades de exploración.
El corte parcial o absoluto de los bigotes, por lo que ello implica, no es una práctica recomendable, pero esto no significa que concretarla se ponga en riesgo de vida al animal. Simplemente, un perro al que se le cortan estos pelos sensoriales dejará de tener sensibilidad al investigar su entorno y, fruto de esa carencia, se mostrará incómodo y desorientado ya que no logrará detectar presas, su equilibrio será inestable y su precisión para identificar obstáculos se verá notablemente disminuida.
Fuente: Diarioavance
