Neymar, que también ocupa un lugar notable en la lista de goleadores con tres tantos, hizo trece faltas en tres partidos, entre ellas una por la que fue sancionado con tarjeta amarilla contra Italia por una entrada dura con la que lesionó a Ignazio Abate.
El seleccionador brasileño, Luiz Felipe Scolari, exigió a todos sus jugadores empeño en tareas defensivas, lo que también incluye a la estrella del equipo. Pero para Scolari, el elevado número de faltas cometido por Neymar se explica por la menuda constitución física del delantero, que mide 1,74 metros y pesa poco más de 60 kilogramos. «Ha cometido una u otra falta porque es delgado y no tiene posicionamiento para parar al adversario como los centrocampistas y defensas. Él llega al balón descoordinado», explicó «Felipão» en rueda de prensa. El gran número de faltas y la tarjeta amarilla llevaron al entrenador a sentar a Neymar en el banquillo en el partido contra Italia en el minuto 68, cuando Brasil ganaba 2-3 y no tenía todavía el partido controlado. Después de Neymar, los jugadores que más faltas han cometido son el brasileño Oscar, con nueve; el uruguayo Diego Lugano, el mexicano Gerardo Torrado, el italiano Mario Balotelli y el brasileño Luiz Gustavo, todos ellos con ocho.
En compensación, Neymar es también el jugador que más faltas ha recibido en la competición, 18, una más que Balotelli, otro de los delanteros más peligrosos de la Copa Confederaciones. Los defensas rivales saben del potencial de Neymar, que ha marcado tres goles, uno en cada partido, y por méritos propios ha sido elegido como el mejor jugador de los tres encuentros que Brasil ha disputado hasta ahora.
Brasil viajó este domingo a Belo Horizonte, donde el miércoles jugará las semifinales contra Uruguay en el estadio Mineirão.
Fuente: Sport.es
