El equipo leproso, dirigido por el «Tata», gritó campeón tras la caída de Lanús 2-0 con Estudiantes de La Plata. Se trata de la sexta estrella a nivel local para los rosarinos
Newell’s Old Boys se consagró campeón del Torneo Final sin jugar, luego de completarse los 45 minutos que restaban del juego entre Lanús, único opositor al título, y Estudiantes de La Plata, que se había postergado días atrás por la muerte de un hincha a causa de un balazo policial.
El pasado domingo, el triunfo rojinegro 3-0 como visitante de Atlético Rafaela y la derrota de River Plate 5-1 frente al Granate hacían presagiar este feliz desenlace; teniendo en cuenta que Lanús, con 32 unidades al igual que el Millonario, debía remontar un 0-2 en el estadio Ciudad de La Plata. Resultado inalterable este miércoles.
El conjunto rosarino celebró la obtención del título en la provincia de Chaco, mientras esperaba jugar el duelo de octavos de final de la Copa Argentina ante a Talleres de Córdoba. Allí, miles de simpatizantes rojinegros se adueñaron de las calles para celebrar. Al igual que una multitud en Rosario, donde los festejos prometen extenderse hasta altas horas de la noche. Pasadas las 22, hora argentina, arribará el plantel al aeropuerto y se paseará por toda la ciudad.
Gerardo Martino llegó al club de sus amores a dar una mano en un momento crítico, donde el promedio del descenso acechaba a la institución y en lo personal tenía ofertas de distintas partes del mundo, para lograr consolidar su proyecto y hacer historia.
Semanas atrás, ante el reconocimiento a su labor, él mismo se encargó de decir que si no ganaba un título, el esfuerzo habría sido en vano, ya que nadie lo recordaría tan sólo por una buena campaña. Y este miércoles, con 38 puntos sobre 54 en juego, logró sacarle seis de diferencia a sus perseguidores para ganar con absoluta justicia el Torneo Final. Además de alcanzar las semifinales de la Copa Libertadores de América.
Newell’s, el club que lo adoptó durante todas las divisiones inferiores y le dio la posibilidad de debutar en primera en 1980, con sólo 17 años, lo reconoció antes de ser un entrenador campeón, al bautizar una platea con su nombre el día en el que el estadio pasó a llamarse Coloso Marcelo Bielsa.
Antes de eso, debió soportar hasta una expulsión del club en 1995 por una decisión dictatorial del ex presidente Eduardo López, quien se mantuvo durante 14 años al frente del club rosarino y con quien el «Tata» se mantuvo siempre enfrentado.
Martino es el jugador que vistió más veces la camiseta de Newell’s y que más títulos ganó con la casaca rojinegra como futbolista y, ahora, como técnico (1988, 1990, 1992 y 2013). Por eso, el reconocimiento de los fieles leprosos, los mismos que le rogaron agarrar aquel fierro caliente a fines de 2011 cuando acosaba el promedio, será eterno.
Fuente: Infobae
