La quisieron tener en el “banquillo” de los castigados y no se la caló. La animadora Natalia Monasterios rompió sus relaciones laborales con Venevisión y ya no estará en el magazine “Portadas”, luego de que la tuviesen en “stand by” por no creerle que estaba enferma.
Natalia Monasterios se largó de Venevisión (acá todo el brollo)
La versión fue confirmada a la marca 2001 por una fuente de La Colina, quien aseguró que la locutora “dejó el pelero” porque “se hartó de tratos no correspondidos”.
Según lo relatado, las actitudes de las nuevos directivos y productores de la planta hacia la artista y otros más, “no son las más idóneas”.
En su caso, todo ocurrió cuando después de notificar que estaba convaleciente por una afección pulmonar, parecida al COVID-19, no le creyeron “ni pío” y la sometieron a una espera continua para volver a la pantalla, situación que la mujer no soportó y les dijo “good bye, chao, chao, sayonara”.
El cuento tiene más
“Ella no ganaba ni medio, no cobraba nada y de paso, colaboraba hasta para el café y desayunos de los camarógrafos, lumínicos, trabajadores de piso, porque a ellos les pagan tres lochas. Tanto Naty, como los otros animadores, siempre han sido atentos con estas cosas, porque saben lo precario que está Venevisión y la desatención que tiene con sus empleados”, relató la informante.
Este rumor llevaba días en el aire farandulero. Incluso, hace poco, Monasterios hizo una dinámica de preguntas-respuestas en Instagram, en la cual indicó que no había aparecido en el mentado espacio.
EFE