Natalia Améstica, exmanager de Canserbero, remitió una carta a sus abogados en Chile, donde cambia su relato y ahora niega haber matado al rapero y a su pareja, Carlos Molnar, volviendo a la versión inicial del suicidio.
En el escrito al que accedió el medio chileno La Tercera, Améstica indicó que el día de la muerte del músico, este le pidió quedarse en su casa la cual compartía con Molnar.
El artista, según relató la mujer, pasaba por un momento personal complejo.
“Tirone (Canserbero) no paraba de llorar, se sentía muy mal pero no lograba entender qué sucedía. Hablamos muchas cosas, pero muchas no tenían lógica, otras sí, pero lo importante es que él no estaba bien”, mencionó.
Según Améstica, Cansebero puso una película y ella se fue a dormir con Molnar. “Se quedó durmiendo en otra pieza, hasta que entrada la noche todo comenzó a volverse más violento”, añadió.
“Nos quedamos dormidos hasta que pasadas las 4.00 de la mañana -o casi las 5.00- escuchamos los golpes a la puerta de esos que por poco la tumban, con una voz muy gruesa llamaba a stoperro (así le decían a Carlos desde el colegio), pegando más fuerte la puerta”, escribió Améstica. Adicionó que al salir a ver, era el intérprete, quien estaba mirándose al espejo con los “ojos rojos y muy tenso”.
Contó que miró a Carlos, quien le hizo un gesto para tranquilizarla. Por ende, ella volvió al cuarto a esperar que todo se calmara, pero eso no sucedió.
“No sé cuánto tiempo pasaría, pero lo que me despertó fueron dos gritos, uno de guerra y otro ahogado, más una seguidilla de golpes muy fuertes unos tras otros. En ese momento al despertar así en mi mente solo se me vino la frase ‘enciérrate aquí’. Me paré de un salto y fui corriendo a mi baño teléfono en mano y fue cuando empecé a llamar al 911. Después de los golpes lo que escuché fue unos vidrios romperse”, detalló en el documento.
En su historia, optó por salir de la habitación. En primera instancia no vio a nadie, solo manchas y desorden. Llamó a Canserbero y a Molnar, pero nadie respondía, hasta que vio a su esposo en el piso.
“Empecé a abrir una a una cada cerradura de la multilock. Los nervios me traicionaron y empecé a pegar gritos volteando para atrás esperando un golpe, hasta que pude abrir la puerta y salir corriendo llamando a los vecinos diciendo auxilio. Fue cuando me abre la puerta mi vecina del frente y ve a Carlos tirado. Su esposo la aparta y me abre la puerta y yo le gritaba ‘¡atacaron a Carlos!’, y la señora Flor me agarra las manos y me dice, en voz preocupada, ‘mi niña se lanzó alguien’, y yo no entendía hasta que me llevó a su balcón y fue cuando vi a Tirone (Canserbero) en el piso”, comenta en el texto.
Natalia Améstica también agregó lo siguiente: “En ese momento mi cabeza explotó, no sabía qué hacer. Pedir el teléfono para llamar a su mamá, a mi familia, a los que me sabía el número, pero entré en shock y me fui a mi cuarto. Tomé a mi perro en mis brazos, pero antes ya me habían dicho oficialmente que Carlos había fallecido”.
De esta forma, niega la versión que dio anteriormente, donde afirmó que lo hizo en complicidad de su hermano.
Sumarium