La mujer sudanesa que había escapado a Italia luego de que se conmutara su sentencia a morir ahorcada, llegó a Estados Unidos el jueves por la noche.
Meriam Yahia Ibrahim Ishag aterrizó en New Hampshire con su esposo de nacionalidad estadounidense y sus dos hijos (una, Maya, nacida mientras estuvo detenida).
El alcalde de la ciudad de Filadelfia, donde hizo escala, la describió como una «luchadora por la libertad».
La comunidad internacional había condenado la decisión de la justicia sudanesa. Ibrahim estuvo sentenciada a muerte en Sudán por renunciar al islam y su caso generó protestas internacionales.
Fue condenada a morir en la horca por haberse casado con un cristiano, algo considerado por las autoridades sudanesas como apostasía para las mujeres musulmanas.
Su defensa apelaba la sentencia diciendo que había sido criada como cristiana por su madre y que nunca fue musulmana.
Sin embargo, las autoridades la consideraban musulmana porque esa fue la fe de su padre ausente y según la ley islámica no se podía convertir a otra religión.
Finalmente fue puesta en libertad y pudo viajar a Italia con su familia después de pasar un mes en la embajada de Estados Unidos en Jartum.
Fuente: BBC Mundo