El exministro de Salud guatemalteco Jorge Villavicencio Álvarez, quien se encontraba en prisión preventiva acusado de corrupción, falleció el lunes por la noche víctima de la COVID-19, según informaron este martes varias fuentes.
La muerte de Villavicencio Álvarez fue confirmada por los canales de comunicación del hospital Roosevelt, uno de los dos más grandes de Guatemala, donde el médico se encontraba internado.
Villavicencio fue ministro de Salud entre mayo de 2012 y septiembre de 2014 con el Gobierno del expresidente Otto Pérez Molina (2012-2015) y también fue director del mismo hospital Roosevelt.
El doctor se encontraba en prisión preventiva desde diciembre pasado, implicado en los casos de corrupción «Asalto al Ministerio de Salud» y «Pacto Colectivo».
Villavicencio Álvarez fue detenido en abril de 2019 por el caso «Pacto Colectivo» y tras presentarse ante la Justicia inicialmente, el médico posteriormente estuvo en paradero desconocido.
El caso «Asalto al Ministerio de Salud» fue divulgado en julio de 2019 por las autoridades y desde esa fecha Villavicencio Álvarez era considerado prófugo de la Justicia, hasta que se entregó en diciembre.
De acuerdo a la investigación del Ministerio Público (MP) en el caso «Asalto al Ministerio de Salud», una red de corrupción operó en la cartera sanitaria entre 2012 y 2014, con la implicación de 112 personas y más de siete millones de dólares desfalcados al Estado.
Las pesquisas, realizadas durante los tres últimos años y algunas de las cuales derivan de otros casos de corrupción en el Ministerio de Salud, evidencian una «cooptación» de esta cartera entre 2012 y 2014, cuando Villavicencio Álvarez era titular durante el Gobierno del Partido Patriota (2012-2015), encabezado por el expresidente Otto Pérez Molina -en prisión preventiva por otras causas de corruptela-.
Nada más llegar a ser ministro, Villavicencio y otras personas cercanas, entre ellas su hija Cándida Saraí y el excandidato a la Presidencia Luis Fernando Pérez, empezaron a analizar cuáles eran las áreas de la cartera en las que podrían hacer negocios y para ello colocaron a allegados en diferentes puestos, estableciendo una estructura interna y otra externa que les permitía llevar a cabo los actos ilícitos, según la investigación.
De acuerdo a medios locales, Villavicencio Álvarez se negó el pasado 7 de julio a ser atendido por hospitales públicos y debido a ello el Organismo Judicial aceptó su traslado a su residencia para ser tratado por el coronavirus, pero no se pudo llevar a cabo debido a falta de personal del Sistema Penitenciario.
Villavicencio finalmente fue atendido desde el pasado 10 de julio en el hospital Roosevelt, donde perdió la vida en la noche del lunes.
Guatemala ha contabilizado hasta la última actualización del martes un total de 39.039 casos de la COVID-19, incluyendo 1.502 fallecidos, la cifra más alta de Centroamérica.
Según datos del Sistema Penitenciario guatemalteco, al menos 200 presos ha contraído el coronavirus y 18 han perdido la vida a causa de la enfermedad.
EFE
