Tener ese momento de intimidad con nuestra pareja, es una de las mejores sensaciones que puedes llegar a experimentar; sin embargo, ¿qué sucede cuando algo no sale cómo se esperaba? Épic fail…
Pasar por estos momentos donde lo único que quieres es taparte con la sábana y no salir de ahí hasta que tu pareja se vaya, es algo de lo más normal, así que aquí te dejamos algunos de aquellos que pueden arruinar tu perfecta noche de pasión.
Toma nota
Su primera vez. No hablamos de la vez que perdiste la virginidad, si no del primer encuentro sexual con tu pareja actual. Ambos se encuentran en un momento crucial, pues no saben mucho de los gustos y preferencias del otro, así que es probable que ambos se sientan un poco torpes, pero no hay de qué preocuparse, el tiempo y la práctica los hará todos unos expertos.
Equivocarse de nombre. Quizá uno de las situaciones más complicadas de solucionar, pues una cosa es que lo llames Brad Pitt my love y otra que le digas en nombre de tu ex, así que ¡aguas!
Un ruido inesperado. Ya sea un gas travieso que se acaba de escapar o el aire que suena al momento del golpeteo durante la penetración, ¡pff! Son cosas realmente vergonzosas, pero normales, así que no tienes de qué preocuparte.
Cuando descubres que no eres la actriz porno perfecta. Te levantas de la cama con una seguridad impresionante, dejas la sábana en su lugar, te paras frente al espejo y descubres que no pareces aquella protagonista XXX que pensabas. En este momento olvídate de las cosas físicas y concéntrate en poner el mejor desempeño físico y sexual con tu galán.
Cuando olvidaste depilarte. O simplemente no esperabas que la situación se presentara en ese momento, aquí lo que puedes hacer es fingir un dolor de cabeza o sacar tu lado más seguro y lanzarte a la aventura.
Fuente: Veintitantos
