MMC Automotriz, ensambladora de los vehículos Mitsubishi y Fuso, advirtió a sus trabajadores que la situación de la empresa es «verdaderamente delicada» y que «el futuro cercano de la misma se encuentra en grave situación de riesgo». Así se lee en un comunicado interno dirigido ayer a sus trabajadores, tanto en Caracas como en la planta del estado Anzoátegui. En el texto se habla de la necesidad de adelantar un programa denominado «100% supervivencia» para lograr la «sostenibilidad» de la compañía.
Una «gravísima caída en la producción», la deuda de 209 millones de dólares que mantiene la empresa con su casa matriz por los incumplimientos de Cadivi y la imposibilidad de importar material de ensamblaje desde octubre pasado son algunos de los elementos referidos en el comunicado para explicar la situación.
«De 48 vehículos diarios que se producían en promedio en el año 2013, las proyecciones para el mes de mayo son alarmantes, ya que se estima un promedio de producción de 14 vehículos diarios», se lee en el texto que recibieron los trabajadores.
Con respecto a la deuda se precisa que de los 209 millones de dólares, hasta 133 millones de dólares poseen una antigüedad de «más de 180 días». Asimismo, se mencionó que de manera «sorpresiva e infortunadamente» la compañía quedó excluida de la subasta del Sistema Complementario de Administración de Divisas (Sicad) realizada la semana pasada. «Este mecanismo iba a permitir colocar órdenes para mantener la producción de al menos 2 meses, lo cual ahora no será posible», refiere el texto.
Por Roberto Deniz
El Universal