El Ministro de Educación Universitaria, Pedro Calzadilla, conversó con los rectores, el gremio docente y estudiantes para dialogar sobre la crisis económica del sector.
«Fue una reunión muy cordial, y el ministro se comprometió en atender nuestras demandas», soltó Robert Rodríguez, directivo de Asociación de Profesores de la UPEL.
Al concluir la cita, que duró casi tres horas, Calzadilla afirmó a los representantes universitarios que en los próximos días anunciará el aumento salarial. También aseguró que pautará una reunión con la directiva de Fapuv y estudiará un incremento de las becas y ayudantías estudiantiles.
«El Ministro Calzadilla se comprometió a visitar los Consejos Universitarios para conocer de cerca la realidad de cada institución y en la próxima sesión del CNU se discutirá el déficit presupuestario», adelantó la rectora de la UCV, Cecilia García Arocha.
Lo bueno duró poco. Al concluir la reunión estudiantes y docentes, en especial de la UPEL y USB que aguardaron hasta el final, fueron agredidos en el Metro de La Hoyada.
«El ataque fue dirigido por Oswaldo Rivero, de VTV y Ávila TV, quien grabó todo para después acusarnos de violentos. Todo al frente de la policía», denunció Rodríguez.
Comiendo huesos
A las 11:00 am autoridades y dirigentes estudiantiles se colocaron a la cabeza de la marcha universitaria que arrancó desde la UCV hasta la sede del despacho del Ministro Calzadilla bajo un sólo grito «Salario y presupuesto justo!.
Fue otra protesta para instar al Ejecutivo para que se aboque a solucionar la crítica situación del sector que afronta salarios deprimidos, becas divorciadas de la realidad y presupuestos que no se ajustan desde 2006.
«¡Y dónde están, y dónde están los reales de la educación, los tiene Calzadilla debajo del colchón!» fue uno de los tantos gritos de la multitudinaria marcha que agrupó a representantes de la UCV, UDO, ULA, UPEL, LUZ, USB, UC, UCLA, UNET, IPC, IPM y Unexpo. «Educo a tus hijos mientras los míos se mueren de hambre» se pudo leer en una de las tantas pancartas que reflejaban la crítica situación del sector.
En la protesta destacaron los huesos, con un olor nauseabundo, que simbolizaron la situación económica que afecta a los profesores. «Estamos pasando muchas necesidades. Nuestros salarios están desfasados», expuso el profesor Gutiérrez. A las 12:30 la manifestación llegó a la sede del MPPEU con la esperanza de ser escuchados.
Fuente: EU